Jesús Santos se dio a conocer durante los 16 días de huelga de recogida de basuras que protagonizaron los trabajadores de ESMASA entre enero y febrero de 2014. Santos, miembro del sindicato comunista CGT, era entonces uno de los portavoces de los trabajadores y, según recuerdan fuentes de la plantilla de la empresa pública, uno de los que mantuvo una posición más dura, que llevó a los empleados incluso a incumplir los servicios mínimos marcados por la empresa.
Si aquella huelga tuvo un momento álgido, ese tuvo lugar el día 1 de febrero. Aquel día, tras una manifestación en la que Santos, como otros portavoces de los trabajadores, ocupó la vanguardia de la marcha, se desató una batalla campal que acabó con 15 detenidos y 21 policías heridos. Aquella acción, que causó destrozos por valor de 200.000 euros, fue el principio del fin de aquella durísima huelga.
Hoy, Jesús Santos es el portavoz de Ganar Alcorcón, la plataforma con la que concurrió a las elecciones después de que fuera descabalgado en IU, su primera opción. De hecho, su desembarco en la plataforma electoral con la que concurrió a las elecciones acompañado de otros exmilitantes de IU, produjo que Podemos le retirase su apoyo.
En las últimas semanas, ha adquirido un notable protagonismo, puesto que trata de liderar un acuerdo con el resto de grupos de la oposición: PSOE, Ciudadanos e IU, para desalojar al PP del Gobierno local, su mayor obsesión.
Santos no esconde sus filias políticas y no duda en alinearse con miembros de la izquierda más radical que incluso han sido condenados por graves delitos. Es el caso de Alfonso Fernandez Ortega, conocido como Alfon, que fue condenado a 4 años de cárcel por tenencia de explosivos durante la huelga general de noviembre de 2012. Durante el Pleno de investidura, Santos se presentó con una camiseta en apoyo al joven en la que se pedía su libertad.
Pese a sus posturas izquierdistas y radicales, el hoy portavoz de Ganar Alcorcón se benefició de la decisión del Gobierno de Enrique Cascallana de blindar a los trabajadores de ESMASA frente a un posible despido. De hecho, el Gobierno local del PP, ha puesto manos a la obra para ver de qué manera revertir la cláusula que concede a estos empleados una indemnización de hasta 100 días por año trabajado en caso de despido. Fuentes municipales han insistido en que esta medida, que convertía a estos trabajadores en privilegiados en comparación con el resto de empleados tanto de la administración pública como del sector privado, es “de dudosa legalidad”.
No solo ha mostrado su cercanía a Alfon, sino que también transmitió a través de las redes sociales su “apoyo incondicional a los 5 vecinos represaliados en Alcorcón por ejercer su derecho a la huelga” en noviembre de 2012. Los cinco a los que Santos considera “represaliados” están a la espera de juicio y para ellos se piden penas que van de los dos hasta los siete años de prisión por daños y desperfectos.
