el_intercambio_gabino_diego_1

Hablar de Gabino Diego es hacerlo de uno de los rostros más queridos de nuestras artes escénicas. Un actor que despuntó en el cine con ‘Las bicicletas son para el verano’, fue también ‘El Rey pasmado’ y ahora derrocha talento en teatro con la comedia ‘El intercambio’, un texto que va más allá de la risa y del cual nos habla Gabino.

Teté Delgado y Gabino Diego, 20 años de matrimonio en el escenario y ella le regala un intercambio de parejas para oxigenar la relación. La cosa promete.

Sí la verdad, yo creo que es muy divertida. El público no para de reírse gracias al texto de Ignacio Nacho y al resto de los actores, no solo estamos Teté y yo. Es una función con unos diálogos ingeniosos y frescos. El punto de partida es ese precisamente: una pareja que lleva 15 años casados y la mujer decide regalarle un intercambio de parejas pero la función habla de muchas cosas.

En todas las comedias, creo, siempre hay un punto de drama. ¿Cuál es ese aspecto aquí?

Exactamente, siempre hay ese punto de drama. En El intercambio se habla de la pareja, del aburrimiento que puede haber a veces en parejas que llevan mucho tiempo juntos. Y por otro lado, en esta función en concreto,  siempre hay alguien con una posición de superioridad respecto al otro. Uno más sumiso y otro más dominante. Y en este caso se ve.

¿Cuán importante es la química con tu compañera de reparto para que funcione una obra de estas características? 

La verdad que estoy encantado en esta función con el reparto. No podía ser mejor. Teté es una actriz maravillosa, muy divertida y luego además es una excelente persona. Generosa a más no poder. Con lo cual la química es muy importante. Los actores a veces hemos tenido que actuar con gente que no te cae bien, pero en este caso no es así y eso se nota.

El intercambio de parejas ya no está tan estigmatizado hoy en día. Y hablando de las relaciones, preparamos al espectador para reír y para reflexionar.

Sí, sí. Desde luego. Lo que me gusta de esta función es que de repente el texto mete al espectador en un viaje con momentos surrealistas al estilo de los Hermanos Marx, o Miguel Mihura. El intercambio de parejas es solo la justificación para hablar de mucho más. Mi personaje, Jaime, empieza a vivir una serie de pesadillas y no sabe cómo salir de ahí. Pero siempre es mejor que lo descubra el público por sí mismo (Sonríe).

Y entre esas reflexiones, lo que cuesta oxigenar una relación.

Hombre que cuesta. Lo que dicen, que hay que estar manteniendo el fuego cada día. La suerte es cuando tienes al lado una persona que te da más de lo que tú le das. El personaje de Teté es todo generosidad y el personaje de Jaime no tanto. Y lo que hablábamos antes, siempre existe alguien más sumiso y otro que se aprovecha más de esta sumisión.

Me vas a dejar cambiar de tercio. ¿Por qué te vemos tan poco en cine?

Pues no lo sé. ¿Tú por qué crees?

Pues buena pregunta, porque has trabajado con los mejores de este país. Y descartando la decisión propia..

No, no. Mira, un día preguntaron a Carlos Santana por qué no había tocado nunca en Televisión Española y dijo: “debe ser algo divino” (ríe). No sé, yo estoy actuando. Estoy haciendo teatro. El teatro es como la madre que siempre te acoge. Ahora mismo tampoco se hacen tantas películas y tampoco hay tanto trabajo. Sigo haciendo personajes muy bonitos en proyectos bonitos y estoy contento. Esto no depende de mi y luego hay una cosa: que yo tampoco hago televisión. Ahora muchas películas están producidas por canales de televisión y normalmente suele trabajar la gente que trabaja en la televisión.

Me comentabas proyectos. ¿Qué tiene que tener un papel para que atraiga a Gabino Diego?

Pues que me guste la obra y el personaje tenga muchas posibilidades. Que pueda hacer reír y tenga mucho recorrido. Que tenga ternura y también momentos dramáticos y en El intercambio, por ejemplo, esto se da.