Retrasos en licitaciones, retrasos en la entrega de licencias de apertura o atasco de expedientes de obra con la posibilidad de originar el silencio administrativo. Este es el día a día en el área de Urbanismo del Ayuntamiento de Getafe, que está sufriendo la nefasta gestión de la alcaldesa, Sara Hernández, y su equipo de Gobierno que no dota de personal necesario el departamento.
La falta de personal es uno de los principales motivos del mal funcionamiento de la concejalía de Urbanismo. Según ha podido saber este periódico, por fuentes internas del departamento dirigido por Jorge Juan Rodríguez Conejo, tres técnicos se han ido por diversas causas, incluidas bajas o fin de la interinidad. Algo similar a lo que ha ocurrido con el ingeniero técnico, que también se ha marchado del departamento. Además, durante las últimas semanas, de tres arquitectos que había solo estaba trabajando uno porque los otros dos estaban de baja. Un hecho que ha ocasionado el retraso en la tramitación de expedientes de obra o de licencias de apertura como, por ejemplo, de garaje, que tarda en tramitarse hasta un año.
Desde los sindicatos señalan que han pedido en numerosas ocasiones a la alcaldesa que reponga las plazas y refuerce el personal de este área, ya que los que hay tienen una elevada carga de trabajo. “Están ajustadísimos y en cuanto hay una baja el trabajo se atasca”, apuntan fuentes del departamento. Un problema que se extiende también a otras áreas como Hacienda o Servicios Sociales, sin embargo Sara Hernández, como el resto de su gabinete, hace oídos sordos a las reclamaciones de sindicatos y trabajadores.
Las consecuencias, concretamente en Urbanismo, son que los expedientes tardan, según los sindicatos, cuatro meses en tramitarse, con el consiguiente perjuicio de los solicitantes. En algunas ocasiones, además, si existe requerimiento para la modificación de la solicitud de licencia, estros retrasos llegan a prolongarse a seis meses e, incluso, más de un año, según ha podido comprobar Al Cabo de la Calle.
La dejadez de Sara Hernández, más pendiente de sus cuitas de partido ahora que su cargo como secretaria general del PSOE de Madrid corre peligro, está provocando un desbarajuste en el Ayuntamiento de Getafe que repercute en la calidad del servicio municipal. La falta de provisión de plazas en todas las áreas está provocando un problema estructural en todo el Ayuntamiento, cuya máxima responsable es, al final, Sara Hernández.
AMENAZAS EN URBANISMO
La mala gestión de Jorge Juan Rodríguez al frente de Urbanismo no es la única piedra en su tarea. A los retrasos en la entrega de licencias de apertura, licencias de obra o adjudicación de proyectos, se añade la denuncia recientemente realizada por el PP de Getafe, que acusa al edil socialista de “amenazar a funcionarios del departamento por reunirse con vecinos”.
Los populares señalan que, concretamente, una vecina había pedido de forma previa el apoyo del partido y también de Ahora Getafe. Todo ello a raíz de la tramitación de una licencia de apertura que, por los hechos arriba expuestos, no se ha tramitado. Una vecina que en el pasado ya mantuvo una disputa legal con el Consistorio por el cierre de su escuela de música y danza en El Bercial.
Pero tras esta solicitud, desde el PP se quejan de que “de forma tiránica y sectaria, Rodríguez ha impedido a los concejales de la oposición acompañar a los vecinos, que habían reclamado el amparo y consejo del Partido Popular y de Ahora Getafe al entender que el Gobierno municipal vulnera sus derechos”.
Tras generarse la polémica que relatan los populares, los concejales de la oposición tuvieron que abandonar la reunión pues “en caso contrario la orden del concejal de Urbanismo era suspenderla y no atender a los vecinos”. Los populares subrayan, en cambio, la buena labor de los técnicos municipales, “a los que se les ha puesto en una situación muy violenta”.
Y así, este nuevo incidente lleva al Partido Popular de Getafe a, entre otras cosas, “reconsiderar la aprobación de diferentes asuntos plenarios en los que el voto del PP es imprescindible, como puede ser el Plan Económico Financiero del Ayuntamiento o las diferentes modificaciones urbanísticas”. Un nuevo torpedo a la línea de flotación del Gobierno de Sara Hernández y su edil de Urbanismo, incapaces de gestionar el Consistorio.
