La incorporación de Cristóbal Parralo como técnico dio el banderazo de salida al nuevo proyecto de la Agrupación Deportiva Alcorcón, que lejos de las profundas reconversiones de veranos anteriores esta vez apuesta por la estabilidad. Ésa es la propuesta de intenciones del presidente del club, Ignacio Legido, que en conversación con Al Cabo de la Calle traza sus prioridades para el nuevo curso, que pasan en resumidas cuentas por configurar un plantel lo más sólido posible aprovechando la continuidad de buena parte de los efectivos del ejercicio anterior, salvar la categoría sin los agobios de las dos últimas campañas sin renunciar a nada, y ampliar la masa social, un reto que se les viene atravesando.

¿Qué sabor de boca dejó la pasada temporada?
Pues un poco como el año anterior. Fue un poco agridulce. Contentos porque todo acabó bien, pero sufrimos hasta la última jornada y desde luego no fue un año fácil.

¿Es de esperar algún tipo de revolución en la plantilla?
Venimos de tres revoluciones y este año toca tranquilidad. El verano pasado se firmaron jugadores con experiencia y alto conocimiento del campeonato con la idea de tener estabilidad y eso es lo que queremos. Revolución, poca. Va a haber algún fichaje, por supuesto, pero siempre con el objetivo de mejorar lo logrado el año pasado.

El elegido para manejar el timón ha sido Cristóbal Parralo ¿por qué se decantaron por él?
Dentro de la terna de opciones que teníamos Cristóbal siempre estuvo en las posiciones de arriba. Es un hombre de club, con experiencia como jugador de elite, como director deportivo y como entrenador. Es el líder que podemos necesitar para el vestuario. Creemos que es un gran entrenador y que además se acerca mucho a los valores del club.

¿Con qué objetivo encaran el nuevo curso?
Aspiramos a tener tranquilidad y conseguir una permanencia a poder ser no estresante. Luego el campeonato nos dirá si podemos aspirar a algo más o no. Cada año somos ambiciosos, pero dentro de nuestras posibilidades. Somos el club que somos y a partir de ahí vamos a tratar de competir al máximo de nuestras posibilidades. Si miramos los datos, nuestro club va a ser uno de los de menos presupuesto, así que habrá que luchar mucho para no sufrir.

¿Cree que existe demasiada exigencia desde fuera?
Por fortuna la gente aspira a que el Alcorcón esté más arriba. Durante años ha habido muchas alegrías, pero el fútbol son ciclos y últimamente hemos estado un poco de bajada, aunque conviene recordar, por ejemplo, que hace dos años alcanzamos unos cuartos de final de Copa que quizá no se hayan valorado como merecen. Somos junto al Numancia uno de los clubes más veteranos de la categoría y la exigencia exterior también nos obliga a ser mas exigentes internamente.

Uno de sus principales ‘caballos de batalla’ es el apartado social ¿hay manera de llevar más gente a Santo Domingo?
La manera más evidente que tenemos es ganar partidos. Y a partir de ahí nosotros ponemos a disposición de la entidad todos los medios para captar aficionados. Estamos firmando acuerdos con otras actividades deportivas de la ciudad y hemos sacado una política de abonos a precios bastante bajos con el objetivo de ponérselo lo más fácil posible a la gente. En cualquier caso, lo que está claro es que si no diviertes con tu fútbol al aficionado le costará más venir.

El spot de la campaña de abonos parece haber tenido una muy buena aceptación…
Pues sí, Y en esta ocasión se demuestra que la imaginación no tiene por qué ser cara, ya que está teniendo unos resultados muy positivos de cara a los medios y a los aficionados. Y en esa línea vamos a intentar a hacer cosas. Queremos acercar el aficionado al club.

¿Se han marcado alguna cifra de abonados para el próximo curso?
La verdad es que no tenemos un límite ni una obsesión en ese apartado. Lo que queremos es que los que venían sigan viniendo y que se incorporen algunos más, y sobre todo que los que vengan se sientan parte del club. Si las cosas funcionan sobre el terreno de juego estoy convencido de que la asistencia mejorará notablemente.

¿Qué sensaciones le transmite el propietario del club, Roland Duchatelet?
Es un hombre muy tranquilo y suele verlo todo en línea positiva. Sabe que lo de los dos últimos años entra dentro de las evoluciones normales en los clubes y cree que ahora nos va a tocar el ciclo bueno. Él siempre hace un seguimiento desde la distancia y le veo tranquilo, con ganas de que el proyecto crezca y algún día rocemos la Primera división.

¿Y ve factible ese desafío de alcanzar algún día la máxima categoría?
Hay que ser realistas. Cada año está más complicado porque cada vez hay más equipos con presupuestos mucho mayores que el nuestro. El Málaga, por ejemplo, baja con un presupuesto de 47 millones y es como si David luchase contra Goliat. Cada vez es más complicado el reto de subir, pero bueno es el campeonato que nos ha tocado y un equipo relativamente similar al nuestro como el Numancia ha estado a punto de ascender, así que todo es posible.

¿Es el equipo soriano un buen espejo en el que mirarse?
Sí, claro. El Numancia es un modelo muy similar al nuestro que ha funcionado. Trabajando bien los fichajes y el día a día del equipo se puede llegar a competir a un alto nivel. La posibilidad de subir existe, pero es muy difícil y no vamos a engañar a nadie. Nuestro objetivo es la permanencia.

El curso pasado acusaron enormemente la falta de gol ¿piensan reclutar algún delantero de postín?
Se está trabajando en ello. Es cierto que si en la temporada pasada hubiera habido más goles estaríamos hablando de otra cosa, aunque también hay que recordar que en los últimos partidos, cuando se cambió el planteamiento táctico metimos más goles. En cualquier caso, vamos a intentar encontrar algún delantero en el mercado que nos garantice un mínimo de 15 ó 16 goles.