Imagen de una de las bicicletas eléctricas de Lime

El Ayuntamiento de Madrid ha anunciado la retirada de las bicicletas privadas de alquiler sin base fija, tras finalizar las licencias el 30 de septiembre. Ahora, tienen una semana para retirar los vehículos de las calles madrileñas.

Borja Carabante, delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, ha señalado que la demanda de BiciMAD, el servicio público de bicicletas compartidas, ha crecido significativamente, con 611 bases y 7.500 bicicletas distribuidas por los 21 distritos de la ciudad.

Al compararlo con los operadores privados, cuya distribución no se ajustó a las condiciones, Carabante destaca que BiciMAD se ha convertido en el referente de movilidad sostenible y ha subrayado que la demanda de BiciMAD es «mucho mayor», lo que refuerza su consolidación como «el servicio principal de movilidad compartida».

Una historia de idas y venidas entre el Ayuntamiento y las seis empresas a las que se les concedió permiso para desplegar 2.802 bicis y que comenzó en marzo del 2022. Desde entonces, estos operadores no han cumplido con la distribución esperada, ya que se les exigía un reparto de 1.999 bicicletas dentro de la M-30 y 1.197 fuera.

Foto de Ernest Ojeh en Unsplash

Fin a los patinetes eléctricos

Esta medida llega justo un mes después de que el gobierno regional revocase las licencias de unos 6.000 patinetes eléctricos privados distribuidos por la ciudad nuevamente por incumplimiento de las empresas privadas en cuanto a su distribución y a la falta de control sobre su estacionamiento en áreas no habilitadas.

Con estas medidas, el ejecutivo regional busca reducir el caos generado por el mal uso de los patinetes y bicicletas sin base fija, mejorando la movilidad y el orden en las calles de la capital.