GARRIDO PRESIDE LOS ACTOS OFICIALES CON MOTIVO DEL 2 DE MAYO, FESTIVIDAD DEL DÍA DE LA COMUNIDAD DE MADRID Foto. D. Sinova

El presidente de la Comunidad de Madrid en funciones, Ángel Garrido, va a pasar de ser la mano derecha de la expresidenta Cristina Cifuentes y encargado de apagar todos los fuegos del Ejecutivo regional a liderarlo. Garrido destaca por su talante conciliador y su perfil amable.

Desde la dimisión de la presidenta estaba considerado el relevo natural por ser el mejor conocedor de la política que se ha hecho a lo largo de la Legislatura. Garrido era su sucesor lógico tras años formando tándem con ella en el partido, donde han defendido enmiendas a ponencias con contenido polémico, como el origen cristiano de la formación, y acompañándola en el Gobierno desde 2015, donde ha sido su sombra.

Precisamente, en el seno del PP es donde Garrido y Cifuentes gestaron su relación de confianza, que se afianzó en 2009, en el polémico Congreso del PP de Valencia, donde ambos debatieron sobre la posibilidad de cambiar que el PP era una formación inspirada en el “humanismo cristiano” por “humanismo de tradición occidental” o “europea”.

Garrido (Madrid, 1964) decidió entrar en política en el Centro Democrático y Social de Adolfo Suárez para unirse años más tarde, en 1991, al Partido Popular. Cuatro años después fue elegido concejal y portavoz del grupo popular en el municipio de Pinto, y posteriormente, en 1999, dio el salto a la capital, donde estuvo como concejal presidente de distintos distritos madrileños, entre los que destacan Villa de Vallecas y Retiro.

De 2011 a 2015, al principio con Alberto Ruiz-Gallardón y después con Ana Botella en Alcaldía, fue presidente del Pleno del Ayuntamiento de Madrid. En esta etapa, según fuentes populares, Garrido siempre destacó por “su capacidad de diálogo y entendimiento con todas las fuerzas políticas”.

Un talante de mediación que trasladó después a la Comunidad de Madrid, donde fue elegido diputado de la Asamblea de Madrid en mayo de 2015 y que permitió liderar las conversaciones con Ciudadanos para alcanzar el Acuerdo de Investidura con el portavoz de la formación naranja, Ignacio Aguado.

Otra de las cuestiones que sus allegados destacan de él es que a lo largo de estos tres años como consejero de Presidencia, Justicia y Portavoz del Gobierno de la Comunidad de Madrid, ha recuperado la interlocución con los agentes sociales en todos los ámbitos de su competencia, negociaciones que estaban rotas.

Pese a ello, en un primer momento el candidato del PP no contaba con el visto bueno inicial de la dirección nacional precisamente por su cercanía con la expresidenta, a la que ha defendido con fervor en multitud de ocasiones.