El proceso de implantación de la Zona de Bajas Emisiones en Getafe, que afecta a los barrios de Centro y San Isidro, está provocando un encendida controversia entre quienes defienden su puesta en marcha y quienes vienen denunciando desde hace tiempo que el amplio espacio que abarca no está justificado y que se fundamenta en un afán esencialmente recaudatorio.
Entre sus detractores figura el Partido Popular, cuyo portavoz, Antonio José Mesa, comparecía este martes junto a uno de los accesos a la ZBE para denunciar “esta abusiva Zona de Bajas Emisiones que nos ha implantado la alcaldesa con agosticidad. Este verano ha tramitado la ordenanza que va a regular este disparate, cuyo coste de implantación es de 2,5 millones de euros, además de que ya han previsto en un estudio que nos ha costado 40.000 euros recaudar 1,5 millones de euros a través de las multas”.
“Desde el Partido Popular”, insistía, “estamos radicalmente en contra de esta ZBE porque se extiende más allá de donde toca. Es cierto que es de imperativo legal ponerla en Getafe, pero se podía haber hecho reduciéndola a su mínima expresión como se ha hecho por ejemplo en Boadilla del Monte, circunscribiéndola a las zonas ya peatonalizadas del municipio. Getafe no tiene un problema de contaminación ni de movilidad en el centro, por lo que estamos ante un puro hecho sectario y cargado de ideología. Lo único que pretenden es recaudar más dinero para pagar su mastodóntico gobierno, que nos cuesta 12 millones de euros a los getafenses”, recalcaba.
Así las cosas, el dirigente popular anunciaba que “hemos presentado una enmienda a la totalidad, queremos que se bonifique el numero del coche al 50%, que no se multe hasta dentro de cuatro años y no haya agravante de reincidencia. Esta ZBE va a ser la puntilla para la hostelería”, advertía, “y por eso cuando sea alcalde lo primero que haré es reducir esta ZBE a las calles peatonalizadas ya de Getafe”.
Por su parte, un grupo de vecinos que ya mostró su oposición a esta medida del Ayuntamiento en el Pleno municipal, se ha movilizado y durante las últimas semanas ha procedido a distribuir cerca de 3.000 carteles en contra de la ZBE por todos los barrios de la ciudad. Entre sus argumentos figuran, por ejemplo, la restricción de la movilidad, el afán recaudatorio del Gobierno local, la inviabilidad del coche eléctrico o la afectación a muchos negocios locales, por citar algunos.
AVANCES EN LA TRAMITACIÓN ADMINISTRATIVA
Ajeno a las críticas suscitadas, el Gobierno local sigue trabajando en el proceso de implantación de la ZBE a través de la tramitación de la ordenanza que regulará la movilidad en el espacio afectado. Y a la vez que avanza en la tramitación administrativa, se trabaja en los sistemas informáticos y tecnológicos que regularán el acceso de los vehículos a la ZBE.
Además, en las próximas semanas se pondrá en marcha una campaña de información a los vecinos concertando una segunda ronda de reuniones con representantes de diversos colectivos para detallarles la aplicación de la nueva reglamentación. Por otro lado, los vecinos disponen de web zbe.getafe.es para obtener información detallada acerca de los vehículos que pueden acceder a la ZBE y las autorizaciones que pueden solicitar llegado el caso.
El concejal de Movilidad y Transporte, Carlos Enjuto, ha sostenido que “la Zona de Bajas Emisiones es un proyecto muy importante para mejorar la movilidad de la ciudad, para avanzar hacia una ciudad más sostenible y cuidar la salud de nuestros vecinos”.