Al secretario general del PSOE-M, Juan Lobato, le gustan mucho los focos. Necesita llamar la atención constantemente y por eso acudió recientemente a Arroyomolinos, a interesarse por la situación de las viviendas de La Arroyada.

Allí, claro, exigió al Ayuntamiento que hicieran su trabajo, se “pusiera las pilas” y asumiera sus responsabilidades. Sin embargo se olvidó de la competencia de la Confederación Hidrográfica del Tajo, dependiente del Gobierno de España, que solo ha dado autorización para la recogida de restos vegetales, sin dotar de medios al Consistorio, que es la Administración más pequeña en este conflicto.

Sea como fuera, los vecinos de La Arroyada llevan desde noviembre de 2021 en vilo por el futuro de sus domicilios, a la espera de que las tres administraciones competentes se coordinen.