Si alguien simboliza las señas de identidad de este CD Leganés ése es Unai Bustinza. El vizcaíno cumple su quinta campaña en Butarque y porta el brazalete de capitán, reflejo inequívoco de su ascendencia en un colectivo que lucha a brazo partido por la permanencia y el pasado fin de semana conquistó un triunfo de capital importancia ante el Celta. El reto de la salvación se antoja descomunal, pero pocos como ‘Bustin’ para transmitir confianza en tiempos difíciles.

Qué victoria tan balsámica la del pasado fin de semana ante el Celta…

La verdad es que sabíamos de la importancia que tenía conseguir los tres puntos, sobre todo teniendo en cuenta que se jugaba en casa. Fue una victoria quizá más sufrida de lo necesario, pero esto es el Leganés y es parte de nuestro ADN, así que hay que seguir así.

Lo que parece claro es que no estaban tan muertos como algunos pensaban

Cuando los resultados no son positivos es fácil ser pesimista y sacar conclusiones negativas, pero más allá de que a nivel de resultados los números son malos, la realidad es que hubo varios partidos en los que el equipo peleó muy bien y estuvo más cerca de ganar que de perder.

¿Qué ha cambiado con la llegada de Javier Aguirre?

Al final el cambio de entrenador siempre nos pone a todos un poco más en la rampa de salida. Ya no hay paraguas en el que escudarse y hay que asumir más responsabilidades. Y luego es cierto que la actitud de Aguirre, su intensidad y el positivismo que nos ha transmitido a la hora de ver lo que somos capaces nos está ayudando muchísimo.

¿Cómo resumiría el manual de estilo del nuevo técnico y qué es lo que más le ha llamado la atención?

Javier lo primero que ha tratado es asentar al equipo de atrás hacia adelante. Hemos trabajado mucho los conceptos defensivos para encajar menos goles. Y lo que más me ha sorprendido es su vitalidad en el día a día y esas ganas de trabajar que luego se trasladan al campo.

En su caso, la confianza de Aguirre parece absoluta

Cuando juegas todo, se agradece mucho y es más fácil adquirir confianza, pero uno es responsable también de los resultados y la respuesta está en tratar de dar siempre un poco más. Estas situaciones te ayudan a crecer como jugador y como persona.

Y después de ‘despachar’ al Celta les toca vérselas con Alavés, Espanyol y Valladolid. Tres finales en toda regla…

Bueno, hasta mayo quizá no podamos hablar de finales, pero lo cierto es que hasta entonces no habrá partidos intrascendentes para nosotros. Cada punto va a ser vital. Cada vez quedan menos fechas, pero la realidad es que ni mañana ni pasado acaba nada.

En lo que va de curso solo han sumado dos puntos de 21 posibles lejos de Butarque ¿tienen en los desplazamientos su gran asignatura pendiente?

Asi es. En nuestro caso es fundamental estar fuertes en casa y este año nos está costando un poco más, pero es cierto que fuera nos cuesta demasiado sumar puntos y tenemos ese debe. Tenemos que dar un pasito adelante fuera porque todo lo que sea sumar es vital.

La que no falla año tras año es la afición pepinera, algo que seguramente agradecerán en momentos tan delicados como el actual

Nuestra afición es reflejo del crecimiento del club. Incluso en situaciones tan malas están ahí. Y la respuesta de la gente en estos momentos todavía afianza más al club. La afición es un valor añadido para el CD Leganés y solo cuando estás dentro sabes lo mucho que te aporta.

¿Por dónde pasaría la salvación?

Vamos a ponernos objetivos cercanos. Ahora tenemos tres partidos muy importantes y hay que tratar de sacar los máximos puntos posibles en este periodo para arrancar la segunda vuelta con las pilas cargadas y con mucho optimismo.

¿Y qué opciones le concede al equipo de mantenerse?

Hoy por hoy tenemos todas las opciones de salvarnos. A partir de ahora los partidos son fundamentales, pero aquí no acaba nada. Estamos muy vivos y el que piense lo contrario anda muy equivocado.