El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CISC) ha desarrollado un test de anticuerpos que permite conocer la inmunidad frente al Covid-19, y con un 98% de fiabilidad. Así lo han demostrado los estudios realizados junto a los servicios madrileños de Inmunología del Hospital Universitario La Princesa y del Hospital Universitario de la Paz.

«Este test es un ejemplo de cómo los años de investigación básica dan sus frutos», ha comentado la presidenta del CSIC, Rosa Menéndez, tras puntualizar el trabajo ha sido desarrollado por cuatro grupos de investigación del Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC).

Además, durante la presentación del nuevo test, Menéndez ha destacado la importancia que para el CSIC tienen las donaciones privadas, ya que les permiten que puedan realizar sus proyectos. De hecho, ha informado de que han recibido más de 12 millones de euros a través de este tipo de donaciones. «Sin ellos no hubiera sido posible», ha asegurado.

Y es que, los test van a ser producidos en formato ‘kit ELISA’, por la empresa española Immunostep, cuyo consejero delegado, Ricardo Jara, ha informado de que cuentan con una capacidad de producción de 14.000 test diarios y que esperan que en «cuestión de semanas» pueda estar disponible en los hospitales.

FIABILIDAD

Los test de anticuerpos actualmente comercializados presentan dos problemas, como así lo ha explicado el jefe del área de Estrategia Comercial e Internacionalización del CSIC, Javier Maira Vidal, la disponibilidad, porque se suele depender de otros países, y su fiabilidad, la cual actualmente llega a entorno al 80%.

«Con el nuevo test se solventan estos problemas ya que es una tecnología española, fabricada en España y que permitirá cubrir tanto la demanda nacional como la de otros países que lo puedan necesitar, y, además, cuenta con una fiabilidad del 98%», ha comentado Maira Vidal.

TRES TIPOS DE ANTICUERPOS

Mar Valés, investigadora principal, ha explicado el proceso de desarrollo de este test, asegurando que permite detectar tres tipos de anticuerpos.

Por un lado, la IgM, la primera que se genera tras la infección y que indica que la persona está iniciando la respuesta a la enfermedad.

Por otro lado, la IgG, que se produce en un momento más avanzado de la infección y puede perdurar en el tiempo, informando, hasta nueve meses después, de una que una persona ha padecido la enfermedad.

Y finalmente, la IgA, que se produce en estados tempranos pero que puede ser detectada en fases tardías.