polideportivo san isidro getafe
Las máquinas han empezado a desbrozar en los últimos días la superficie del recinto

Es lo que tiene el mundo de la política. Que en cuanto se adivinan elecciones en el horizonte siempre acaban brotando como setas esos malos gobernantes que en vísperas de los comicios ‘resucitan’ proyectos olvidados confiados en que ese mantra de que ‘la última imagen es la que queda’ cale entre los votantes. Es el caso de la alcaldesa de Getafe, que en el último suspiro de la legislatura ha rescatado del cajón una serie de actuaciones pendientes que cuatro años atrás figuraban como prioritarias en su programa electoral y que ahora, contrarreloj, trata de devolver al primer plano de la actualidad.

Las imágenes, tomadas este mismo miércoles, revelan el estado de absoluto abandono que presenta el recinto

El caso más palmario es el del polideportivo San Isidro, del que ya les hemos ido dando cumplida cuenta desde estas páginas. Cerrado a cal y canto en 2012, y tras dos concursos fallidos por parte del Ejecutivo ‘popular’ de Juan Soler para rehabilitar la instalación a través de una concesión privada, Sara Hernández lo convirtió en su proyecto estrella para la legislatura que ahora agoniza comprometiéndose a ejecutarlo en varias fases y tenerlo prácticamente acabado en el actual mandato.

Sin embargo, a la hora de la verdad los hechos hablan por sí solos. Y resultan desalentadores para el equipo de Gobierno socialista, que lo único que ha hecho de manera realmente visible para los vecinos ha sido derruir los dos pabellones cubiertos del recinto, que prácticamente se caían ya a trozos.

Vista panorámica de los terrenos del antiguo polideportivo de San Isidro, que permanecen absolutamente yermos

Pues bien, después de tener la instalación abandonada a su suerte, justo cuando llega el periodo electoral va la alcaldesa y anuncia la adjudicación de los trabajos para la ejecución de la primera fase de la obra, es decir, la que incluye actuaciones como la construcción de un centro acuático, una zona de juegos deportivos aledaña al parque de San Isidro o una zona de aparcamiento, para lo cual se destinará una inversión de 4,3 millones de euros.

En cuatro años de legislatura apenas se ha procedido a la demolición de los dos pabellones cubiertos

Como si de un ‘deja vú’ se tratase, Sara Hernández señalaba hace escasos días que el polideportivo de San Isidro “es el proyecto más ambicioso al que se ha enfrentado el Ayuntamiento de Getafe en la última década’. Eso mismo dijo hace cuatro años y posiblemente tenga parte de razón, pero lo que no dice es que ha dilapidado un tiempo precioso yendo de incumplimiento en incumplimiento de sus reiteradas promesas.

Y ahí están las fotografías que ilustran esta información -tomadas este mismo miércoles- para certificar, por si no estaba suficientemente claro, que la superficie del complejo sigue siendo un auténtico erial para desgracia de los sufridos vecinos de la zona, que ven pasar los años sin poder disfrutar de una mísera instalación deportiva en su barrio.