El Partido Popular de Leganés ha recogido este martes la denuncia de los profesionales del Centro de Atención Integral al Drogodependiente (CAID), que desde el pasado día 1 de febrero no dispone de personal de seguridad dos días a la semana, en concreto los miércoles y los jueves.

Esta falta de vigilancia, precisan, genera una situación de desprotección y desamparo al personal que desarrolla su labor en el centro, así como a los pacientes y familiares que acuden al mismo.

Según recoge la mencionada denuncia de los trabajadores, y difundida desde el PP leganense, «atendemos a una población que no solo tiene problemas de consumo de drogar, sino patologías añadidas, situaciones de marginalidad y trastornos mentales que llevan a que las posibilidades de darse situaciones de actos violentos se multipliquen».

De hecho, desvelan que «se han llegado a presenciar en el centro agresiones con arma blanca y en alguna ocasión hemos tenido que cerrar ante situaciones de riesgo para prevenir agresiones físicas hacia el personal».

Todo ello sin olvidar que cuando los profesionales se encuentran en sus despachos, el centro queda libre de acceso y sin control, con la posibilidad de acceder al archivo de historias cínicas con información confidencial, además de que en sus instalaciones «se almacenan y dispensan estupefacientes que por ley tienen que estar custodiados y controlados».

«El CAID de Leganés es el ejemplo perfecto del ‘Llorentismo’, versión local y chusca del ‘sanchismo’. Estuvo más de un año sin médico, más tiempo aún con una plantilla de terapeutas en precario, y ahora no tienen vigilantes. No tienen nunca lo que necesitan», ha declarado Miguel Ángel Recuenco, líder de los populares de Leganés, tras visitar el centro.

EL AYUNTAMIENTO RESPONDE QUE LA SITUACIÓN ES TEMPORAL

Una vez conocida la denuncia efectuada a través del PP, el Ayuntamiento de Leganés ha contestado que «los Ayuntamientos no tenemos competencias en materias sanitarias, por lo que la obligación de mantener este servicio es de la Comunidad, que es quien debe decidir qué va a hacer con los CAID de la región».

Por lo que respecta al CAID de Leganés, el Gobierno local ha explicado que «cuenta con personal de control de acceso todos los días de la semana, mientras que la presencia de vigilante se adecúa a los momentos en que se produce la dispensación de metadona y los controles de orina, que son los días más sensibles en el centro».

«Aun así», subrayan, «se trata de una situación temporal y el Ayuntamiento trabaja en una nueva reorganización para poder ampliar el servicio de vigilancia en los próximos meses».