Difícil encontrar un calificativo que defina con fidelidad la trascendencia del duelo de este miércoles (Santo Domingo, 19.00 horas) entre el Alcorcón y el Sabadell. A tres partidos de la conclusión del campeonato, alfareros y vallesanos ventilan en 90 minutos una parte considerable de sus opciones de permanencia, así que todo invita a pensar en un duelo sin tregua que en buena lógica supondrá un golpe de autoridad para el vencedor y un traspié casi definitivo para el que caiga, especialmente si es el conjunto visitante.

La realidad es que el Alcorcón llega al encuentro en mejor disposición, no solo porque juegue en casa -que eso parece menos decisivo sin público en la grada-, sino sobre todo porque transita fuera de los puestos de descenso y aventaja en dos puntos a su adversario.

A nivel deportivo, el cuerpo técnico del conjunto alcorconero podrá contar con la práctica totalidad de sus efectivos con la única excepción confirmada de Boateng, pero Anquela rehuía cualquier tipo de confianza en vísperas de tan señalado compromiso. “Es un partido muy, muy, muy complicado para los dos y el que logre mantener la calma y jugar mejor estará más cerca de ganar”, sostenía el técnico andaluz antes de recordar que “aquí no regala nadie absolutamente nada”.

Anquela: «Si no queda gasolina, nos queda la ilusión; aquí no valen excusas, la ilusión te tiene que llevar a los sitios»

A estas alturas de temporada y teniendo en cuenta que se han programado tres jornadas en apenas una semana, parece lógico pensar que el aspecto físico puede tener una importancia capital, aunque Anquela no está por la labor de esbozar justificaciones antes de tiempo. “Si no queda gasolina, nos queda la ilusión. Aquí no valen excusas, la ilusión te tiene que llevar a los sitios y yo creo que lo conseguiremos”, en alusión al objetivo de la permanencia.