La Intervención Municipal de Leganés da un tirón de orejas al Gobierno de PSOE y Ciudadanos. Y es que ha alertado en un informe que el Ayuntamiento ha duplicado en un año el plazo de pago a proveedores, pasando de los 64,24 días que saldaba sus deudas en 2021 a 123,42 días actualmente, cuando la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Financiera de las Administraciones Locales fija un máximo de 30 días.

La propia interventora municipal ha exigido al Ejecutivo de Santiago Llorente que remita el informe al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas para «su publicación y seguimiento», y ha llamado al Gobierno municipal a «acelerar los procesos administrativos» y a «aplicar un plan de tesorería» para atajar el hecho de que el Ayuntamiento tarde hasta cuatro meses en pagar a proveedores.

Esta circunstancia ha sido criticada por el PP de Leganés, cuyo portavoz y candidato, Miguel Ángel Recuenco, ha denunciando que «los mejores proveedores huyen de Leganés porque saben que no cobran», echando en cara al Ejecutivo de PSOE y Ciudadanos que declare casi 50 millones de superávit mientras tarda en pagar cuatro meses a los proveedores.

«Conocemos casos dramáticos que tienen miedo de denunciar su situación porque temen represalias y que sus facturas queden eternamente en los cajones. Le pido al alcalde que se tome en serio el plan de pago a proveedores que le pide Intervención y que no piense sólo en que son acreedores, que piense que son familias al borde del colapso económico. Y que está ahí para gestionar, no para dejarnos deudas cuando lleguemos al Gobierno», ha zanjado Recuenco.