El Getafe sigue cuesta y sin frenos. Ni siquiera en la Copa ha sido capaz de redimir su errática trayectoria liguera. Si en la primera ronda ya sufrió lo indecible para superar al CD Anaitasuna, en la segunda ha caído eliminado ante el Córdoba, un histórico en horas bajas que ahora milita en Segunda B y que ha apeado del torneo del K.O. al colectivo azulón gracias a un solitario tanto de Ledesma cuando apenas se habían cumplido seis minutos.
Como era de esperar, Bordalás ha diseñado una alineación plagada de cambios respecto al último compromiso liguero y con la principal novedad del juvenil Mamor compartiendo la punta de ataque con Ángel. La puesta en escena, sin embargo, ha dejado mucho que desear y los locales no han tenido el más mínimo problema para defender su tempranera renta, ya que el guardameta Becerra ha sido prácticamente un espectador más hasta el descanso.
Al Getafe no le quedaba otra que poner toda la carne en el asador y el técnico levantino ha echado mano tras la pausa de Cucurella, Arambarri y Portillo, a los que poco después se ha sumado Jaime Mata. Poco a poco, el conjunto getafense ha ido metiendo atrás a su oponente y las ocasiones han empezado a sucederse con cierta asiduidad.
Timor, Ángel y Mata han rondado el gol, pero el el que más cerca lo ha tenido ha sido Arambarri, que en el 80′ ha estrellado un cabezazo en el larguero. El final se acercaba y primero Ángel y luego Etxeita volvían a acariciar el empate, aunque la última ha sido para el local Piovaccari, que ya en el 94′ no ha acertado a sentenciar en un mano a mano con David Soria.
Derrota traumática, pues, para un Getafe que siempre ha tenido en alta estima el torneo copero y que por segundo año ha vuelto a quedarse fuera mucho antes de lo previsto. Teniendo en cuenta que en la Liga la trayectoria tampoco está respondiendo a las expectativas la figura de Bordalás, indiscutible hasta hace bien poco, empieza a estar en el disparadero.
