El Ministerio de Sanidad ha publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) la orden que impone el confinamiento de más de cuatro millones de habitantes de la Comunidad de Madrid, bajo el pretexto de evitar los contagios de coronavirus. Dicha orden da al Gobierno regional un plazo de 48 horas para su acatamiento, si bien la presidenta, Isabel Díaz Ayuso, ya ha dicho en una entrevista en Es Radio que recurrirá.

La orden del ministro de Sanidad, que salió adelante sin consenso en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, exige para confinar más de 500 contagios por 100.000 habitantes, un 10% de positivos y una ocupación de UCI superior al 35%. Esto significa que Alcorcón, Fuenlabrada, Getafe, Leganés, Alcalá de Henares, Móstoles, Parla, Torrejón de Ardoz, Alcobendas y la propia capital quedan confinadas.

El ministro de Sanidad y posible aspirante a ser candidato del PSOE a las elecciones en Cataluña, una vez inhabilitado Quim Torra, ha publicado esta orden en el BOE un 1 de octubre, coincidiendo curiosamente con el tercer aniversario del Golpe de Estado del secesionismo catalán.

Una orden que además supone un golpe a la economía no solo madrileña, también la española, pues supone que la hostelería cierra a las 23.00 horas, se prohíbe el servicio en barra y el aforo al 50% tanto en bares y restaurantes como en establecimientos. Además la movilidad a los ciudadanos se limita solo a su ciudad, de la que podrán entrar y salir con causa justificada. Se limita también el aforo en instalaciones deportivas, velatorios y entierros.

AYUSO RECHAZA LA INTERVENCIÓN

La presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, ha rechazado que el Gobierno central obligue a Madrid a ser intervenida «con la justificación del consenso» y estudia junto a el abogado del Ejecutivo autonómico cómo oponerse a los criterios «a vuela pluma».

En una entrevista en ‘esRadio’ ha criticado que el ministro de Sanidad, Salvador Illa, estuviese de acuerdo con las medidas de la Comunidad al principio de la semana pasada pero a finales, «mandado por (Pedro) Sánchez», decidiese «enloquecer con las prisas» de que había que cerrar y confinar Madrid.

«Y ya durante el fin de semana hiperactividad de Illa en todos los medios, de repente hay que confinar Madrid, todo es un desastre, transmisión comunitaria, todo horrible… como si todo estuviera colapsado, como si fuera la muerte, y obligatoriamente tener que ceder a sus ideas», ha lanzado. La presidenta ha señalado que desconoce por qué este cambio, no sabe si es porque están funcionando sus medidas o si tiene «algo que ver con Cataluña».

EL PLAN «DESTROZA MADRID SIN CRITERIO»

Además, ha cuestionado el criterio de restringir la movilidad con 500 contagios por 100.000 habitantes porque considera que no se tiene en cuenta la capacidad elástica que tiene la región y que es capaz de «triplicar» sus UCIs así como los test que realiza. A su parecer, y al del consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, el plan del Ministerio «destroza Madrid sin criterio».

Para Ayuso, el afán del Gobierno es haber estado desaparecido y ahora «tener muchas prisas en volver a imponer todo por decreto». «Si me dijeran que esto va a funcionar, pues todavía lo podríamos pensar, pero hasta ahora lo que esta claro es que tenemos que buscar fórmulas intermedias. No puedes confinar a todo el mundo», ha subrayado, al tiempo en el que ha indicado que la opción de «todo cerrado» les parece que solo se podría adoptar «en casos extremos».

Según ha expresado, el Consejo Interterritorial no puede «imponer nada y menos de esta manera» por lo que están estudiando con el abogado de la Comunidad de qué manera hacen las cosas «correctamente». La jefa del Ejecutivo autonómico ha remarcado que no se pueden hacer esas restricciones de movilidad con unos criterios «a vuela pluma».