El Centro de Mayores del Ayuntamiento de Valdemoro no ha recuperado la normalidad, dos años y medio después de que se abrieran tras el confinamiento obligado por la pandemia de Cóvid-19. Y sus usuarios siguen sin recibir todos los servicios de los que disfrutaban antes de la crisis sanitaria.

Así lo ha denunciado el portavoz del Grupo Socialista en el Consistorio, Serafín Faraldos, quien asegura que el Centro de Mayores debería haber recuperado la totalidad de sus servicios a los que está obligado por el Reglamento del Centro de Mayores por este Pleno Municipal, y de obligado cumplimiento desde el 26 de octubre de 2016. “La covid-19 no puede ser una excusa para la merma de servicios a los usuarios del Centro de Mayores”.

Es cierto que el centro fue objeto de una reforma en el verano de 2020, en la que el Consistorio invirtió 30.676 euros, dirigida a pintar paredes y techos del interior de las dos plantas del edificio, así como rejas, barandillas exteriores, puertas y cerrajería de la terraza.

Pero esa adecuación de las instalaciones no ha venido acompañada de una vuelta a los servicios que se ofrecían antes de la pandemia, de manera que el centro sigue sin tener prestaciones tan básicas como la cafetería, que lleva cerrada desde la pandemia y no hay noticias de que se vaya a reabrir próximamente. También han tenido problemas con los servicios de podología y peluquería, dos prestaciones muy demandadas por los mayores, que se retomaron el pasado mes de noviembre gracias a la colaboración de la Asociación Benéfica Geriátrica (ABG).

Y, lo que es en estas fechas es aún más doloroso, sigue sin tener calefacción, lo que hace la vida en el centro inhabitable, según puede leerse en el texto de la proposición presentada por los socialistas. Y no abre los sábados por la tarde y a los mayores se les impide realizar actividades tan habituales como jugar a las cartas.

El Grupo Socialista ha llevado al próximo Pleno Municipal una proposición en la que insta al Gobierno Municipal a reabrir el centro en su horario habitual, a reabrir la cafetería, a reparar la calefacción…

Porque, según asegura Faraldos, “los usuarios del Centro de Mayores están siendo objeto del peor trato que puede recibir un ciudadano de Valdemoro, y es de consenso generalizado que las personas mayores son un colectivo que por obligación política y moral, debe ser protegido, atendido con orden, y se permite el término, hasta cualquier mimo es poco para ellos, que se lo merecen todo”.