Le ha costado sangre, sudor y lágrimas, pero el Innova-tsn Leganés seguirá una temporada más en la Liga Femenina Endesa, la máxima competición de baloncesto femenino a nivel nacional. Lo consiguió con dos partidos de antelación al cierre del curso, pese a ceder en casa ante el Lointek Gernika gracias a que también perdió el Bembibre, pero lo realmente importante es que certificó la permanencia en el año de su estreno.

Ha sido la de su debut en la máxima categoría una campaña llena de vicisitudes y adversidades que en determinados momentos situaron al equipo al filo del precipicio, pero a todas supo sobreponerse. Desde el paso de cuatro entrenadores por el banquillo, hasta los numerosos cambios de jugadoras o la ola de covid que mediatizó el rendimiento de la plantilla cuanto atravesaba su mejor momento.

Y de todo eso, de lo bueno y de lo malo, dice haber tomado buena nota José Jacinto Ramos, de cara al futuro. El presidente y ‘alma mater’ del club leganense ha hecho balance para Al Cabo de la Calle de esta primera experiencia en la Liga Femenina Endesa, una competición tan exigente que casi le cuesta la salud pero que con el objetivo conseguido bien ha merecido la pena.

«YA SABÍAMOS QUE NOS IBA A COSTAR MUCHO»

“Está claro que es una liga muy difícil y ya sabíamos que nos iba a costar mucho. Además”, apunta, “ha habido muchos condicionantes a lo largo de todo el año. No arrancamos de la mejor manera y ése es un problema que hemos ido arrastrando hasta dar con la tecla tanto con la plantilla como con el cuerpo técnico”, explica.

Ramos admite de entrada que “se nota un montón el cambio de la liga con respecto a la que estábamos jugando” y recalca que como punto de partida “no había otro objetivo que la permanencia”, por lo que desde ese prisma “tenemos que estar muy contentos”. Sin embargo, reconoce que “no hemos disfrutado la temporada como nos hubiera gustado”.

El máximo responsable de la entidad no oculta “sinsabores” provocados en buena medida porque “hemos tenido demasiados problemas antes de iniciar la competición y ha habido que cambiar cosas que no hubiéramos tenido que cambiar si hubiéramos hecho las cosas de otra manera”, indica antes de insistir en que “no hemos disfrutado como nos hubiera gustado, pero sí hemos peleado a tope y nos queda la satisfacción de haber conseguido el objetivo”.

Echando la vista atrás, lo peor de todo “ha sido el día a día. Ésta es una competición que te exige mucho y no hay descanso. Por eso lo peor ha sido ver cómo te surgían los problemas y no poder pararte ni disfrutar de estar en esta liga”.

En ese sentido, advierte que “no podemos repetir los errores de planificación de este año. Es absolutamente fundamental el trabajo previo a la temporada y tomar decisiones”, recalca antes de recordar que “si encima no tienes un presupuesto holgado, pues hay menos margen de error todavía”.

El curso apenas acaba de echar el cierre, pero Ramos subraya que “aquí no se puede parar y desde ya empezaremos a configurar plantilla, presupuesto y muchas cosas. Es una liga que cada año se hace más profesional y nos tocará trabajar muy duro para dar un pasito adelante y poder disfrutar más el año que viene. A ver hasta donde somos capaces de llegar”, apostilla.