Pues tampoco en el Sardinero perdió la AD Alcorcón su condición de invicta fuera de casa en lo que va de temporada. Y son ya trece los compromisos seguidos sin perder a domicilio, saldados con un balance de tres victorias y diez empates, con lo que iguala la mejor racha de su historia en este apartado. Para localizar la última derrota del colectivo alfarero lejos de Santo Domingo en compromiso oficial habría que remontarse al 8 de junio del pasado año, día en el que cayó derrotado por 2-1 en su visita al Granada.

De aquello han pasado nada menos que 242 días y los de Fran Fernández pueden preciarse de ser el único equipo de categoría profesional que todavía no ha perdido en calidad de visitante. Números en mano, la AD Alcorcón acumula 19 puntos a domicilio y marcha cuarto en este apartado por detrás de Almería (23), Cádiz (21) y Elche (21). Curiosamente, como local ha sumado cuatro puntos menos (15) en idéntico número de compromisos.

Además, esta invulnerabilidad fuera de casa, unida a perceptibles atisbos de mejoría al amparo de sus aficionados en Santo Domingo, ha posibilitado que los alfareros hayan hilvanado siete jornadas consecutivas sin conocer la derrota (seis empates y un triunfo). «Los partidos suelen se más abiertos cuando salimos fuera y eso nos viene bien», expone a modo de explicación Fran Fernández, para quien «es una pena que en casa nos esté costando más. Esperemos que esta semana hagamos bueno el punto y sea la segunda victoria seguida en casa porque si nos hacemos fuertes como locales no pasaremos apuros».

66 MINUTOS EN INFERIORIDAD NUMÉRICA

El punto obtenido este pasado domingo ante el Racing de Santander resultó, además, especialmente meritorio teniendo en cuenta que el colectivo amarillo jugó desde el minuto 24 en inferioridad numérica por la expulsión de Laure, la segunda en lo que va de curso. «Ha pedido perdón al grupo», desvelaba el técnico andaluz antes de precisar que el jugador «piensa que la expulsión es un poco injusta porque cree que en la última amarilla no ha habido ninguna protesta. No sé. Al final son tarjetas que se pueden evitar por ambas partes», opinaba antes de agradecer el enorme esfuerzo desarrollado por el equipo «porque se ha dejado el alma».