La alcaldesa de Alcorcón, Natalia de Andrés, ha avanzado su Gobierno pondrá los nombres de Francisco Largo Caballero e Indalecio Prieto, a dos espacios públicos de la ciudad, si bien no ha especificado dónde se ubicarán.

El segundo teniente alcalde y líder de Podemos en Madrid, Jesús Santos, ha señalado también que «en Alcorcón estamos comprometidos con la democracia, y desde el Gobierno queremos homenajear a dos dirigentes de la República, que se volcaron en la lucha por una España justa que no dejara a nadie atrás.

La alcaldesa de Alcorcón ha defendido esta decisión, después de que el Ayuntamiento de Madrid decidiera retirar el nombre del callejero de estos dos dirigentes del PSOE, en aplicación de la Ley de Memoria Histórica.

CRÍTICAS DE PP Y VOX

El anuncio ha sido criticado por PP y VOX, al considerar que generan división en la población. La portavoz del PP, Ana Gómez, se ha comprometido a que «en 2 años y medio, cuando sea alcaldesa de Alcorcón, sustituiré esos nombres de zonas emblemáticas, por otros que no generen odio y confrontación en los vecinos».

Además ha asegurado que «desde el PP no permitiremos saltarse la ley ni dividir a los vecinos», proponiendo el nombre de Emilita, «impulsora de nuestras tradiciones», o Doña Alfia Herrera, primera maestra de Alcorcón, a alguna de las calles. «Ellas sí hicieron cosas importantes por nuestra ciudad».

Por su parte e, líder de VOX, Pedro Moreno, ha cargado contra Santos al recordarle que «el problema de querer reescribir la historia y no leer, es que no te enteras de que los tuyos, los comunistas, contribuisteis al derribo de Largo Caballero y de Indalecio Prieto».

EL ‘LENIN ESPAÑOL’

Largo Caballero e Indalecio Prieto fueron destacados miembros del PSOE en los años 30, ocupando carteras ministeriales en los gobiernos de Manuel Azaña. También tuvieron un fuerte protagonismo en los días que condujeron a España a una Guerra Civil fratricida.

Así Largo Caballero, conocido como el ‘Lenin español’, fue uno de los principales instigadores del Golpe de Estado contra la II República en 1934. Y es que ese año, Caballero impuso la “vía insurreccional” en el PSOE.

Dentro del partido, Sus seguidores echaron de la Ejecutiva de la UGT, a otros destacados socialistas como Julián Besteiro, que siempre se opuso a esta estrategia golpista y al acercamiento a los comunistas, postulados que acabaron triunfando en el PSOE.

Posteriormente, ya iniciada la Guerra Civil en septiembre de 1936 y con el apoyo del PNV, Esquerra Republicana y el Partido Comunista, presidió el Gobierno de lo que el bando rojo consideró aún la República, pese a que el país se encontraba ya en medio del conflicto.

Finalmente, en 1938, antes de la entrada de las tropas de Franco en Barcelona, donde residía Largo Caballero, este huyo a París junto a su familia, donde acabó muriendo en 1946.

Indalecio Prieto, por su parte, también fue uno de los políticos más activos del Golpe de Estado de 1934, aunque posteriormente en el exilio mexicano, se arrepentiría de este hecho, previo a la Guerra Civil.

“Me declaro culpable ante mi conciencia, ante el Partido Socialista y ante España entera, de mi participación de aquel movimiento revolucionario. Lo declaro, como culpa, como pecado, no como gloria. Estoy exento de responsabilidad en la génesis de aquel movimiento, pero la tengo plena en su preparación y desarrollo”, llegó a decir Prieto, que una vez iniciada la contienda y ante el peso que ganaron los comunistas, trató de oponerse a estos en varias ocasiones.