La Cámara de Cuentas de la Comunidad de Madrid fiscalizará el ejercicio del año 2018 del Ayuntamiento de Getafe, así como sus entidades dependientes, como por ejemplo LYMA o GISA.

Se trata de una decisión propia del organismo autonómico que analizará las cuentas del Consistorio getafense y las empresas públicas. Una vez concluido el estudio, la Cámara emitirá un informe donde incluirá una declaración sobre la fiabilidad y exactitud de las cuentas presentadas.

Fuentes municipales han declarado a Al Cabo de la Calle que «se trata de una selección aleatoria que se va realizando por todos los ayuntamientos» y que «en Getafe hace muchos años que no se hacía». En este sentido quieren dejar claro que «no corresponde a ninguna irregularidad» y que «solo cumplen su función de control».

Y es que este martes, el portavoz del PP de Getafe, Carlos González Pereira, señalaba sobre este asunto que su partido estará atento al informe del órgano autonómico. «Veremos en qué queda la próxima intervención de la Cámara de Cuentas en el Ayuntamiento de Getafe respecto a la gestión del Gobierno socialista. Vamos a estar atentos a los resultados», advertía.

SUBVENCIONES EMBARGADAS

Este anuncio de la Cámara de Cuentas coincide con la información adelantada por el diario ABC acerca de que el Ayuntamiento no podrá disponer de una parte de las subvenciones que reciba de la Comunidad de Madrid por deber más de 60.000 euros a un trabajador municipal al que se le modificaron sus condiciones laborales en 2013.

De acuerdo a esta información, la sentencia del pasado 21 de enero remitía a otra de 2017 donde se advertía al Gobierno de Sara Hernández sobre este extremo. Y la cantidad reclamada no se ha abonado, con lo que se ha procedido al embargo de las subvenciones regionales.

Por el momento el Ayuntamiento no ha querido hacer ninguna valoración tras ser preguntado por este periódico.