David Pérez pone punto y final a ocho años como alcalde de Alcorcón. Aunque seguirá presente en la ciudad, siendo el presidente del PP local, Pérez pone rumbo a la Comunidad de Madrid con la conciencia tranquila de dejar un municipio con las cuentas saneadas; con los índices más bajos de criminalidad de la zona sur; pionera en el sacrificio cero de animales, siendo la ciudad con menos parados, según datos del propio Ministerio de Empleo y habiendo reducido el periodo de pago a proveedores y la deuda que dejó el Ejecutivo de Enrique Cascallana y Natalia de Andrés, que todavía sigue haciendo de las suyas en la localidad.
Es decir, David Pérez deja una ciudad muy distinta a la que heredó de los socialistas. Con más aciertos que fallos. De hecho aún quedan cuestiones pendientes por resolver, como el dichoso CREAA. Ese fastuoso edificio ideado por el PSOE que parece maldito. También queda pendiente la cuestión de la limpieza de la ciudad, a todas luces mejorable y que a buen seguro marcara los próximos cuatro años tras las elecciones de mayo.
Ana Gómez se ha batido el cobre en ESMASA frente a una oposición que tiene la mayoría en la empresa municipal de limpieza y recogida de residuos
Por eso ahora el rumbo del PP lo coge Ana Gómez, la actual tercera teniente de Alcalde de Alcorcón, concejala de Seguridad y presidenta de ESMASA. La empresa municipal de recogida de residuos y limpieza donde se ha batido el cobre frente a la oposición en estos últimos meses. De hecho, en Alcorcón, ESMASA es el único organismo donde los partidos de la oposición tienen mayoría. Y viendo el resultado de la gestión, trasladado al conjunto del Ayuntamiento, podría llegar a ser un desastre de proporciones apocalípticas.
Así pues, Ana Gómez tiene en sus manos continuar con la estabilidad que llegó a Alcorcón hace ocho años. Si llega a la Alcaldía, la candidata de los populares en los comicios locales heredará una ciudad muy diferente a la de su antecesor. No será un trabajo fácil, pues como es evidente quedan asuntos por hacer en lo que queda de legislatura y en el periodo venidero.
Si llega a la Alcaldía, Ana Gómez heredará un municipio más saneado que cuando lo empezó a gobernar David Pérez hace ocho años
Sin embargo su nombramiento para seguir la senda de crecimiento marcada desde 2011 es un acierto. Como concejala de Seguridad, Gómez ha logrado los mejores resultados de Alcorcón en esta materia. Basta ver cada Balance de Criminalidad del Ministerio del Interior para comprobar que aquí también se han hecho bien los deberes.
Y no solo eso, pues la reacción inmediata a su nombramiento por partidos como el PSOE y afines ha sido la de cargar contra ella de manera furibunda. Sinónimo de que tener como cabeza de lista en Alcorcón a Ana Gómez es la decisión más acertada que cabía esperar.
Ahora le toca a la candidata dar todo de sí misma para que Alcorcón no vuelva a la UVI donde la dejaron los socialistas. De ahí la importancia de las elecciones municipales del 26 de mayo, donde el municipio se juega el futuro de continuar con la estabilidad o lanzarse al vacío al que le abocaran las políticas de izquierdas que tanto daño han hecho a un municipio que hoy es la referencia del sur de Madrid.
