El próximo 26 de mayo arrancan las fiestas de Getafe, con la bajada de la Virgen desde el Cerro de los Ángeles. Pero no todo el mundo está para festejos en la ciudad. Sobre todo un colectivo, el de la Policía Local, que una semana antes, ha salido a la calle harto de los constantes desplantes del Gobierno municipal compuesto por PSOE y Podemos.
Concretamente, según relatan los convocantes, por “los recortes de derechos producidos en Policía Local, escasez de efectivos y falta de transparencia en las actuaciones”. La imagen va a ser de decenas de policías frente a las puertas del Ayuntamiento reclamando lo que legítimamente consideran que deben reclamar. Y la concejala de Seguridad: ¿a qué espera para dejar a un lado su ego sindicalista y sentarse a escuchar a sus homólogos policiales?
El Gobierno de PSOE y Podemos lleva toda la legislatura haciendo luz de gas con la Seguridad en Getafe, pero la Policía Local ha dicho basta. La plantilla no está para fiestas, ante tanto desplante político, y lo hace saber en las calles
Es del todo incomprensible que en vísperas de las fiestas patronales no haya unidad entre todos los colectivos municipales para garantizar una mínima seguridad de los festejos. No nos cabe la menor duda de que los agentes cumplirán, siempre lo hacen. Pero: ¿estarán a la altura los mandos políticos? Pues esperemos que sí, pero los augures no son nada halagüeños.
El Gobierno de Sara Hernández ha hecho luz de gas de la seguridad desde el inicio de la legislatura. El término proviene de la obra de teatro homónima de Patrick Hamilton, estrenada en 1938, y de sus adaptaciones cinematográficas en 1940 y 1944. En síntesis, esta estrategia psicológica consiste en negar la realidad, dar por sucedido lo que nunca pasó e, incluso, manipular la información para que la víctima, en este caso el pueblo getafense, dude de su experiencia y percepción de inseguridad.
Así encontramos afirmaciones de la responsable política de la Seguridad en Getafe, como que “es un hecho tangible que se está aumentando la plantilla de Policía Local”, cuando hay 61 plazas vacantes. O “no hay un problema real con bandas latinas ni bandas juveniles violentas” y la inseguridad “es inexistente”, cuando a finales de abril, en pleno centro de la ciudad, tuvo lugar una pelea a machetazos entre pandilleros, y solo en 2021 las infracciones penales crecieron en torno a un 19% en Getafe, en comparación al 2020.
En fin, que la luz de gas socialista ha fracasado, afortunadamente, y la Policía Local ha dicho basta. Ahora solo falta saber si el Gobierno de Sara Hernándes se deja de zarandajas y manipulaciones y escucha de una vez por todas a los representantes policiales y a quienes piden un giro en la política de Seguridad. Las fiestas de Getafe están en juego, pero más aún, las vidas de los vecinos. Y eso es algo que no hay que tomarse a broma, alcaldesa.
