El hospital Universitario Severo Ochoa de Leganés ha derivado a otros centros sanitarios de la región a más de 170 pacientes con coronavirus que permanecían en el servicio de Urgencias, según fuentes del complejo hospitalario.

Estas derivaciones han supuesto un «balón de oxígeno» para el servicio de Urgencias, que ahora están «más aliviadas», según las mismas fuentes.

De hecho, los pacientes atendidos permanecen «en camas y sillones cómodos» y el personal sanitario realiza sus labores «sin la presión asistencial sufrida el fin de semana».

Los sindicatos habían denunciado que la situación de «colapso era insostenible» en el Severo Ochoa, ya que el servicio atendía a unos 250 pacientes con síntomas compatibles con el coronavirus, cuando su capacidad máxima es de 90 pacientes. Los pacientes estaban pasillos, en sillas y sin la distancia recomendada de un metro para evitar contagios.