Resultaba difícilmente imaginable cuando arrancó la competición allá por finales de agosto que las cosas les irían tan mal a los tres representantes de la zona sur madrileña en Segunda división. Tanto que al término de la 16ª jornada ocupan tres de los cuatro puestos de descenso. El cuarto es para el Amorebieta, único ‘forastero’ en los más bajos fondos de la categoría de plata. El último en caer a esta indeseable zona de la clasificación ha sido el Fuenlabrada, mientras que tanto el Leganés como el Alcorcón llevan ya muchas semanas instalados entre los cuatro últimos.

CF FUENLABRADA
(19º, 16 puntos)

Es el único de los tres que inició razonablemente bien el campeonato llegando a enlazar seis jornadas sin perder y a coquetear incluso con la zona de playoff, pero el derbi que le ganó al Leganés (2-1) el pasado 10 de octubre marcó un punto de inflexión en su trayectoria porque no ha vuelto a conocer la victoria.

Desde entonces, el colectivo fuenlabreño ha disputado siete compromisos con un balance de tres empates y cuatro derrotas, lo que traducido a puntos supone que ha sumado 3 de los últimos 21 en juego, un desalentador registro que explica su progresivo desmoronamiento en la tabla hasta caer entre los cuatro últimos clasificados este pasado fin de semana.

La negativa inercia del ‘Fuenla’ se reflejó fielmente en Valladolid, donde cayó por 3-0, “un resultado excesivamente abultado para lo que se va visto sobre el terreno de juego”, opinaba José Luis Oltra a la conclusión del duelo a la par que admitía que “cuando estás en esta dinámica, todo lo malo que te puede pasar, te pasa. La expulsión, le lesión, la falta de acierto…”, enumeraba el técnico del conjunto fuenlabreño, que este viernes recibe en el Fernando Torres al Mirandés, un rival directo a día de hoy en la lucha por eludir el descenso.

CD LEGANÉS
(20º, 15 puntos)

Es el caso que posiblemente más llame la atención de los tres porque hablamos de un equipo concebido para luchar por el ascenso a la máxima categoría y que lleva ya muchas semanas instalado entre los cuatro últimos clasificados. La adversa puesta en escena del conjunto pepinero acabó llevándose por delante a un auténtico símbolo como Asier Garitano, que no logró dar con la tecla en esta segunda etapa.

En su lugar llegó Mehdi Nafti hace tres jornadas y desde entonces el ‘Lega’ ha firmado dos empates y un triunfo. No ha perdido y se ha notado cierta mejoría en defensa, pero sigue sin superar la asignatura pendiente de Butarque, que ha perdido su condición de fortín de otros tiempos. De hecho, el balance como local del cuadro leganense es de una victoria, cuatro empates y tres derrotas, es decir, 7 puntos de 24 posibles.

Uno de los principales beneficiados por el cambio de entrenador ha sido Recio, que observa cierta mejoría. “Hemos recuperado solidez defensiva y eso es importante para ir sumando puntos”, decía antes de sostener que “en estas últimas semanas con el nuevo míster se están viendo muchas cosas sobre el terreno de juego”, mientras que en el plano personal “estoy muy contento porque tenia muchas ganas de jugar. Han sido dos meses muy duros, pero ahora se me abre una puerta”.

AD ALCORCÓN
(22º, 8 puntos)

Es con diferencia el que peor lo tiene para salvar la categoría. Solo ha conseguido sumar 8 puntos después de 16 jornadas desgranadas, está a 9 de distancia de la frontera de la permanencia y va ya por el tercer entrenador desde que arrancó la competición, así que peor no podían haber empezado las cosas este curso para el conjunto alfarero, que ya sufrió la indecible la campaña anterior para mantener la categoría.

Su principal lastre tiene que ver con la facilidad con la que recibe goles (33 en 16 partidos), tal y como volvió a certificarse el pasado fin de semana ante el Eibar, cuando encajó dos tantos en los 20 primeros minutos de partido que a la postre acabaron resultando decisivos para el triunfo del conjunto armero.

Fran Fernández reconoce que “hay que hacer autocrítica e iniciar los partidos con un poco más de intensidad por lo mucho que nos estamos jugando, que la situación es muy difícil”, aunque también subraya que “después de un 2-0 el equipo se levantó y eso no es fácil frente a un rival como el Eibar”. No esconde el técnico almeriense que “necesitamos ganar partidos, y cuanto antes mejor, pero con esta actitud estoy convencido de que vamos a salir de esta situación”.