El Ayuntamiento de Leganés tiene puesto en marcha un programa de control de plagas para evitar de forma ecológica el uso de los tradicionales insecticidas químicos y pesticidas perjudiciales para la salud de los vecinos.

Este proyecto pionero consiste en soltar mariquitas y aphidius (una especie de avispilla pequeña) en los árboles para que eliminen las plagas de pulgones. Estos insectos depredadores se colocan en unas pequeñas cajas en las ramas de los árboles para acabar con los insectos de forma natural.

Desde la Delegación de Sostenibilidad ya se ha implantado este sistema en 300 árboles de dos especies distintas en los barrios de Zarzaquemada, Batallas y el Ensanche de San Nicasio.

A la presentación pública de esta iniciativa ha acudido el director general de Sostenibilidad y concejal electo, Francisco Javíer Márquez, y el técnico municipal responsable del control de plagas Gregorio Pintor.

EVITAR EL USO DE PESTICIDAS

«Apostamos por evitar el uso de pesticidas, herbicidas e insecticidas para hacer desaparecer los insectos y lograr así una ciudad cada vez más sana y ecológica”, ha manifestado Francisco Javier Márquez.

Por su parte, el técnico municipal Gregorio Pintor ha declarado que «este método es eficaz y muy duradero en el tiempo, ya que al ser insectos autóctonos permanecen en el árbol año tras año por lo que el efecto es muy duradero y totalmente inocuo e inofensivo para las personas”.

Según fuentes municipales, «Leganés es referente en este sistema ecológico y son muchas las ciudades que nos visitan para interesarse por el proyecto».