Nacho García

Cinco victorias de cinco posibles sitúan al Ynsadiet Leganés al frente de la clasificación del grupo B de la Liga Femenina 2 de baloncesto junto al Spar Gran Canaria, el otro equipo imbatido en lo que va de competición. Al frente del proyecto leganense está por sexto curso consecutivo Nacho García, que este lunes compartía con Al Cabo de la Calle las buenas sensaciones que alberga de cara a una temporada que no ha podido empezar de mejor manera.

Poco más se le puede pedir a la puesta en escena del Ynsadiet Leganés, ¿no cree?
La verdad es que hemos empezado de la mejor manera posible, sobre todo teniendo en cuenta que en estas cinco jornadas teníamos dos de los favoritos para disputar el playoff de ascenso como el Ciudad de los Adelantados y el Alcobendas. Esas dos victorias nos han dado un empujón importante. Salvo algunos momentos puntuales de falta de concentración no se puede poner ningún pero al equipo.

Lo que pasa es que dentro de nada tendrá que escalar un auténtico ‘Everest’ midiéndose consecutivamente a Spar Gran Canaria, Valencia y Canoe…
Este año la competición es mucho mas difícil que otros años no solo porque haya muchos equipos muy buenos, sino porque los que aspiran a mantener la categoría son mejores que otros años. Ganar fuera se ha puesto también muy caro. Vamos a ir partido a partido, que eso no lo ha inventado el ‘Cholo’, y a seguir mejorando porque todavía tenemos un margen de crecimiento importante.

En principio la islandesa Hildur Kjartansdottir no podrá jugar ante Gran Canaria al ser convocada por su selección. Una baja tremendamente sensible de confirmarse.
Todos intentamos mejorar la competición trayendo mejores jugadoras como Hildur, pero con las malditas ‘ventanas FIBA’ estamos indefensos. En Liga Femenina 2 estamos un poco expuestos a que el rival te lo quiera cambiar o no el partido de fecha. Para Gran Canaria no será fácil mover el partido si no figura como norma federativa. Intentaremos cambiarlo si es posible, y si no intentaremos no echarla de menos.

Otra de las nuevas es Kiara Kudron, que promedia nada menos que 20,5 créditos de valoración por partido. Menudo descubrimiento.
Es una jugadora diferente porque pese a medir 1,90 es muy móvil. Probó durante un tiempo con el voley y eso le ha dado un cuerpo privilegiado para jugar al baloncesto. Es capaz de postear y de tirar, es la segunda en asistencias y sobre todo le gusta mucho entrenar. Ha encajado en la ciudad y en el equipo muy bien. A ninguna de las tres extranjeras de este año le podemos poner un solo pero.

¿Cree que una de las claves para que no se ascendiera el pasado curso radicó en el discreto papel de las incorporaciones foráneas?
Bueno. Esta temporada el equipo entero se ha juntado para tomar algo mas veces ya que en toda la temporada anterior. Que la química del grupo sea buena nos ayuda a que todo resulte más fácil.

¿En que ha cambiado el bloque en líneas generales respecto a la campaña pasada?
Somos mucho más estables que el año pasado. Ahora no tenemos esos altibajos. Hemos mejorado mucho en la posición de base con Esther Moreno. La conozco bien, es muy competitiva y nos da muchas cosas. Básicamente queremos desquitarnos de las malas sensaciones que nos dejó el año pasado. Somos optimistas de que vamos a competir hasta la última jornada por acabar entre los cuatro primeros. Estoy convencido de que el equipo no va a fallar respecto a esas lagunas o egoísmos que teníamos el año pasado.

¿Sería un fracaso no clasificarse para disputar de nuevo la fase de ascenso?
Estamos acostumbrados a lidiar con esas cosas. Seria más una desilusión que un fracaso. Este año será más complicado porque hay muchos equipos que pueden estar ahí, pero mientras yo no pueda poner un pero a la actitud de mis jugadoras lo vamos a intentar con todas nuestras fuerzas.

¿Y a la afición qué mensaje le enviaría?
Estamos notando que la gente tarda un poco en engancharse y estoy convencido de que tener mucha gente en el pabellón te refuerza y te da ese empujón extra. Me gustaría hacer un llamamiento a la gente para que se pase por nuestra cancha porque el que va, repite.