Imagen del edificio de La Cantueña (foto: Ayto Fuenlabrada)

El Partido Socialista de Fuenlabrada presentará en el próximo Pleno municipal una moción en la que pedirá que el centro de menores migrantes no acompañados de La Cantueña, que la Comunidad prevé abrir en el municipio, lleve el nombre de la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso.

Los socialistas justifican esta propuesta «en reconocimiento al esfuerzo de la presidenta en conseguir por todos los medios que este espacio se ubique en Fuenlabrada».

La moción señala que la Comunidad de Madrid realizará «la mayor inversión realizada por el Gobierno regional en Fuenlabrada en décadas», en total, 19 millones de euros, para instalar este macrocentro en la localidad.

Además, subraya que la presidenta pretende convertir a Fuenlabrada «en el único espacio de la región para la llegada de estos y estas menores».

En esta línea, los socialistas consideran que el centro se ubica en un lugar «aislado y masificado en el que los principios de igualdad, equidad, no discriminación, singularidad y solidaridad serán de imposible cumplimiento», han señalado.

Además, según el Consistorio fuenlabreño, se levantará en «un espacio cedido hace años por el Ayuntamiento para otro fin», concretamente para fines de difusión ambiental. El Consistorio aprobó hace unas semanas la reversión de ese suelo» y, lo que es más importante, lo hará «de manera unilateral y a espaldas del Gobierno local».

SIN CONSENSO

En ese sentido, recuerda la moción que la Comunidad de Madrid pretende poner en marcha este macrocentro «sin una llamada, sin una reunión, sin información y sin mostrar el proyecto ni las verdaderas intenciones del mismo».

El centro, concluye el texto, «será el principio (y podríamos decir que el único) legado que dejará la presidenta Isabel Díaz Ayuso en la ciudad de Fuenlabrada».

En este punto, recuerda que actualmente hay tres procedimientos judiciales abiertos con motivo de la «decisión unilateral de la Comunidad». Dos de ellos en juzgados de lo contencioso administrativo referentes a la paralización de las obras y a la reversión del espacio de la Cantueña, ambas cuestiones aprobadas por el Ayuntamiento y recurridas por la Comunidad de Madrid.