Pedro Sánchez (Foto: Moncloa)

Pedro Sánchez ha anunciado este lunes que convoca elecciones generales adelantadas el 23 de julio. En una declaración institucional sin preguntas en Moncloa, Sánchez ha informado que ha hablado con el Rey Felipe VI para comunicarle la convocatoria de un Consejo de Ministros extraordinario y la disolución de las Cortes.

«Asumo los resultados», ha dicho Sánchez, que ha optado por someter por el «mandato democrático a la voluntad popular». La decisión la toma, pues, tras el descalabro del PSOE a nivel nacional en las elecciones municipales y autonómicas.

Y es que los socialistas han perdido frente al Partido Popular por cerca de 750.000 votos. Los populares han recuperando seis comunidades autónomas, como la Comunidad Valenciana, Islas Baleares, Aragón o Extremadura, además de cosechar una aplastante mayoría absoluta en la Comunidad de Madrid. Solo el PSOE ha podido conservar Asturias, Navarra y Castilla La Mancha, donde Emiliano García Page es, además, uno de los más críticos de Pedro Sánchez.

Sobre los presidentes que han perdido, Sánchez considera que «magníficos presidentes y alcaldes socialistas van a ser desplazados, pese a haber llevado a cabo una gestión impecable». La segunda consecuencia, según ha mencionado, es que numerosas instituciones pasarán a ser administradas por nuevas mayorías conformadas «por el Partido Popular y VOX».

Finalmente, el presidente del Gobierno recalca que ya ha sacado adelante «las grandes reformas comprometidas en el discurso de investidura, en el programa de Gobierno».