El PP ganó las elecciones municipales en Leganés. Hasta 9 concejales conquistaron los de Miguel Ángel Recuenco, la fuerza más votada. Para gobernar la ciudad durante los próximos cuatro años, el 17 de junio tiene que haber 14 votos a favor para los candidatos de las respectivas formaciones, si no es así, gobernará la lista más votada en las urnas: el PP.

Esa fue la voluntad de los vecinos de Leganés, que dieron la segunda posición al PSOE, con ocho ediles, y la tercera a ULEG, en claro retroceso, pasando de 4 concejales en 2019 a solo tres ahora. Desde 2015, el partido de Carlos Delgado se ha dejado por el camino la mitad de representantes.

Lejos de hacer autocrítica, pese a la evidente pérdida de confianza, Delgado se ha descolgado exigiendo un hipotético pacto con fuerzas de izquierda, como el PSOE, al que tanto ha denostado en todo este tiempo, exigiendo ser alcalde. Y eso pese a ser la tercera fuerza y contar con solo tres ediles.

Una frivolidad inmerecida para una ciudad de casi 200.000 habitantes, un farol o cortina de humo para apaciguar a aquellos vecinos, que le echarían en cara pactar con el PP y VOX, después de autoproclamarse progresista. De hecho, en 2011, una de tantas veces que se presentó a las elecciones, posibilitó un Gobierno de Jesús Gómez para el PP, lo que hace indicar que por ahí irían los ‘tiros’ en esta ocasión, pese al ruido de fondo y el ‘minuto de gloria’ perseguido con ahínco por el candidato de ULEG.