Foto: laliga.es

Un fantástico lanzamiento de falta de Bardhi en el minuto 60′ ha certificado la victoria del Levante en el Coliseum ante un Getafe que ha ido claramente de más a menos a lo largo del partido y que ha acusado especialmente el gol del delantero granota. Con esta derrota, los de Bordalás encadenan cuatro compromisos consecutivos sin ganar en los que tan solo han sumado dos puntos sobre doce posibles.

Y eso que la primera parte del conjunto azulón ha sido más que decente, con escasas concesiones al Levante y unas cuantas ocasiones reseñables. De entre todas, la más clara ha sido de Maksimovic, que a los 31 minutos se las ha apañado para rebañar un balón y encarar a Oier, que ha logrado sacar el pie en última instancia para abortar el remate a bocajarro del serbio.

También Molina ha rondado el gol un par de veces. En la primera se ha topado también con el pie de Oier tras dibujar una excelente acción cerca de la línea de fondo y rematar cruzado con la curda. Y en la segunda no ha llegado por poco a empujar en el segundo palo un toque de cabeza de Mata.

Mucha menos presencia ofensiva ha tenido el Levante, que hasta el descanso apenas ha dispuesto de un envenenado disparo de Prsic desde la frontal que se ha marchado cerca de la madera.

Pero las cosas han cambiado sobremanera en la segunda mitad, en la que los visitantes han dado un decidido paso adelante y la entrada en escena de Bardhi ha resultado determinante, ya que con un excelso lanzamiento de falta a los 60′ minutos ha decantado definitivamente el duelo del lado levantinista.

Y es que el Getafe apenas ha tenido capacidad de reacción en la media hora final a pesar de que Bordalás ha ido echando mano sucesivamente de Bergara, Ángel y Rober Ibáñez. De hecho, la ocasión más clara antes del final ha sido para Toño, que ha sacado partido de un despiste de la zaga azulona para plantarse ante David Soria y enviar su remate al palo.

El arreón final de los locales apenas les ha dado para botar un puñado de saques de esquina sin ninguna conclusión reseñable y por segundo año consecutivo el Levante ha asaltado el Coliseum, un recinto que se le da de maravilla.