desahucio leganes

Momentos de gran tensión se vivieron en el primer intento para desahuciar a una vecina del barrio de El Carrascal. Los vecinos se enfrentaron a la policía, la vecina amenazó con tirarse por la ventana y los servicios sanitarios tuvieron que acudir a la vivienda.

Sara Vázquez, madre soltera de 28 años de edad, con dos hijos menores a su cargo, de ocho y un año respectivamente, se enfrenta al alzamiento de la vivienda en la que habitan en la avenida de Bélgica de Leganés, por orden del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 8.

Sara accedió a esta vivienda después de que un matrimonio que ocupaba esta casa lo abandonara después de ser denunciados judicialmente por usurpación por la Agencia Social de la Vivienda (antiguo IVIMA) hace unos años.

Accedió al piso, junto al cual viven sus padres, y quiso regularizar su situación. Comenzó a pagar los recibos de la comunidad de vecinos y otros gastos y se puso en contacto con el organismo encargado de la vivienda social.

La ejecución del alzamiento de la vivienda se paralizaría finalmente y el juzgado ha dictado un mes de aplazamiento de la orden de desalojo. Sara Vázquez ha declarado que “me dan un mes de plazo pero no me voy a ir ni en un mes, ni en un año, hasta que no me den una vivienda digna”.

TENSIÓN

Durante el intento de ejecutarse el desahucio de la familia se vivieron varios momentos de extrema tensión. El primero, cuando la policía intentó entrar en la comunidad de vecinos y un numeroso grupo de personas impidió el acceso de los agentes. El segundo, cuando esta madre amenazaba con tirarse desde una de las ventanas de la vivienda, situada en la primera planta del bloque.

La ejecución del alzamiento se ha paralizado durante un mes por decisión del juzgado

Al interior de la casa accedieron los servicios sanitarios para interesarse por el estado de salud del niño de un año, que padecía bronquiolitis, y por el estado de ansiedad de la madre. Hasta el lugar de los hechos acudirían también los bomberos en previsión de incidentes mayores.

Medio centenar de vecinos del barrio arroparon a esta familia coreando cánticos como “no toleramos ni un desahucio más”, “vergüenza me daría desahuciar a una familia” o “no le importa a nadie echar a niños en la calle”.

El partido Leganemos acudió a mostrar su apoyo a Sara Vázquez. Su portavoz, Fran Muñoz, valoraba como un acto de justicia el aplazamiento del desahucio y declaraba que “la Justicia debería actuar con un poquito más de prudencia cuando hay niños de por medio”.

Muñoz añadía que “es intolerable que una mujer con dos hijos a su cargo sea desahuciada de un piso del IVIMA, que se supone que está para ayudar a los más necesitados, sobre todo de un bloque que es un ejemplo de convivencia donde nunca ha habido conflictos”.

Uno de los miembros de Leganemos, presente durante la intervención policial, tuvo que declarar en los Juzgados y fue puesto en libertad a la espera de juicio. Según miembros de este partido «tendremos que desmontar la acusación de la Policía con testimonio de la gente que estuvo allí».