Sigue sin espabilar el CD Leganés, que después de cinco jornadas disputadas no ha sido capaz de dar con la tecla buena y estrenar su casillero de victorias. Tampoco lo consiguió ante el Sporting de Gijón y la consecuencia de su derrota en El Molinón, unida a la remontada del Alcorcón en su visita al Mirandés, es que el conjunto alfarero traspasa al pepinero la condición de colista, algo de todo punto insospechado cuando arrancó la competición pero que viene a reflejar la nefasta puesta en escena de los de Garitano. Cierto es que esto apenas acaba de empezar, pero todo lo que no sea empezar a sumar pronto de tres en tres puede empezar a disparar las alarmas.

La situación ha cogido a todo el mundo con el pie cambiado. También a la presidenta del club, Victoria Pavón, que durante la presentación de los equipos femeninos celebrada este lunes admitía abiertamente que “no nos esperábamos empezar de esta manera porque no es el sitio que nos corresponde. Tenemos un gran equipo, un gran cuerpo técnico y lo que necesitamos”, argumentaba, “es empezar a sumar para salir de ahí”.

Un arranque tan negativo conlleva a menudo que la figura del entrenador pueda estar en entredicho, pero en el caso de Garitano la presidenta afirmaba que “lo que menos nos planteamos es cuestionar al entrenador. Creemos que la situación es circunstancial y que es cuestión de encadenar un par de victorias para salir de ahí”, sostenía.

Por lo pronto, el ‘Lega’ se las verá este sábado en Butarque con el Amorebieta, otro recién ascendido al igual que antes lo fueron Real Sociedad B, Burgos e Ibiza. Y a ninguno de ellos pudo hincarle el diente, aunque la historia siempre está ahí para ser cambiada.