La portavoz de VOX en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, ha avanzado que su grupo votará a favor de la investidura como presidenta la Comunidad de Isabel Díaz Ayuso. «Nosotros cumplimos nuestra palabra», ha dicho Monasterio.

«El movimiento se demuestra andando y la libertad ejerciéndola, por eso vamos a trabajar, para garantizar la libertad de los madrileños», ha dicho la líder de VOX, que ha desgranado la «libertad para que los impuestos de los madrileños paguen servicios públicos esenciales, no a financiar chiringuitos ideológicos o pagas para inmigrantes ilegales».

También «para que los padres podamos educar a nuestros hijos conforme a nuestras convicciones, y los madrileños no seamos colectivizados en función del sexo u orientación sexual».

Monasterio ha hablado de la libertad «para caminar por las calles, sin miedo a ser abordados por manadas de delincuentes sexuales o ser atracados al regresar a casa. Libertad para que nuestros hijos crezcan en barrios prósperos y seguros, sin bandas de delincuentes, narcopisos y sin una casa de apuestas en cada portal».

VOX también trabajará «para que cada madrileño pueda acceder a una vivienda digna a un precio asumible», y para que nuestros mayores tengan derecho a ser llevados a un hospital». En definitiva, «libertad para hacer frente a esta izquierda sectaria y totalitaria pero de verdad, contra sus dogmas y dejando de gestionar sus políticas».

CIERRE DE TELEMADRID

Por otro lado, Rocío Monasterio también ha abogado por rebajar el gasto público a su juicio «innecesario». Y eso pasa por el cierre de Telemadrid y también por una ser más «ambiciosa» y rebajar el Gobierno regional de los nueve consejeros que dijo ayer Ayuso, a los siete con los que gestionó en funciones tras convocar elecciones.

«¿Por qué los madrileños tenemos que pagar de nuestro bolsillo a quienes insultan a diario en televisión? Y si no se puede cerrar de forma inmediata abra que reducir drásticamente su coste», ha zanjado.

RIFIRRAFE CON SERIGNE MBAYÉ

Monasterio también ha manifestado que «no es racismo denunciar el ataque con cuchillos de un chico en Moncloa para robarle el móvil ni es racismo decir que un 611% de delincuencia aumentó al estar abierto centro de menas en Batán. Eso no es racismo, es la realidad que sufren muchos madrileños cada día», ha lanzado.

En este punto, Monasterio ha trasladado que su problema con el diputado de Podemos, Serigne Mbaye, «no es que sea negro, blanco, alto o bajo» si no que es una persona que «entró de forma ilegal saltándose la cola de entrada de mucho legales que habían cumplido los requisitos y que durante años se ha lucrado vendiendo de forma ilegal a las puertas de los comercios y las pymes».

Mbayé le ha pedido retirar su alusión y Monasterio se ha negado, momento en el que la presidenta de la Cámara, María Eugenia Carballedo, también le ha recomendado retirarlo aunque no ha sabido dar motivo de por qué debía hacerlo, protagonizando un momento incómodo con su socia de investidura.