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CF Fuenlabrada: el virus del éxito

No es casualidad que el CF Fuenlabrada ostente al término de las siete primeras jornadas la etiqueta de ‘equipo revelación’ de la categoría de plata del fútbol español. Si le faltaba un nuevo espaldarazo para ratificar su condición ahí estuvo el triunfo en el Heliodoro. No solo por la entidad de su adversario, un Tenerife concebido para altas metas y que llegaba a la cita en un pletórico estado de forma, sino también porque buena parte del plantel azulón se había visto afectado por una gastroenteritis que obligó a suspender la cita previa ante el Zaragoza y mermó su despliegue físico en la segunda mitad del duelo ante los chicharreros.

El único virus que parece tener inoculado el colectivo dirigido por Mere Hermoso en este arranque de competición es el del éxito. El mismo que marcó su devenir la pasada temporada propiciando una inercia positiva en la que el ‘Fuenla’ sigue instalado pese al cambio de categoría.

Además, las buenas sensaciones se están viendo fielmente correspondidas a nivel numérico. Tal es así que el conjunto fuenlabreño no solo marcha cuarto en la tabla clasificatoria, sino que es el mejor equipo de la categoría a domicilio (tres victorias en cuatro desplazamientos) y acumula ya 13 puntos en su casillero pese a contar con un partido menos.

A nadie se le escapa que la continuidad de buena parte del bloque de la temporada anterior resulta fundamental para explicar el excelente funcionamiento a nivel grupal, pero también es reseñable la creciente aportación de los refuerzos. El último ejemplo de ello es Iban Salvador, autor del decisivo tanto que se tradujo en los tres puntos ante el Tenerife. “El equipo ha trabajado los noventa minutos como lo veníamos haciendo en las primeras jornadas”, decía el jugador catalán a la conclusión del encuentro del Heliodoro antes de concretar que “hemos vuelto a creer en nosotros”.

El propio técnico, Mere Hermoso, incidía en la relevancia del apartado mental. “Confío en el carácter de estos jugadores”, señalaba en la sala de Prensa del Heliodoro tras un triunfo que había requerido “un esfuerzo brutal por parte de mis jugadores. Hemos sufrido muchísimo en el apartado físico porque el rival nos ha exigido muchísimo”, admitía, “y por eso hay que poner en valor esta victoria. Estamos muy felices y orgullosos, pero tenemos muy claro que en esta categoría cada victoria cuesta un mundo”.