El destino ha querido que Getafe y Valencia se vean las caras el próximo lunes en un duelo plagado de urgencias para ambos debido a su errático rumbo liguero. Dos proyectos concebidos para transitar por escenarios ambiciosos pero que a día de hoy andan lejos, lejísimos, de acercarse a las expectativas iniciales. De hecho ambos se encuentran ubicados en puestos de descenso e inmersos en sendas crisis de resultados que tienen disparadas todas las alarmas.
El problema es que su mala dinámica de resultados se ha acentuado en los últimos tiempos, hasta el punto de que azulones y valencianistas son los dos únicos equipos de la competición que no conocen la victoria en lo que llevamos de 2023. En el caso del Getafe, su último triunfo data del pasado 30 de diciembre (2-0 al Mallorca) y desde entonces acumula un balance de 2 empates y 4 derrotas, lo que se traduce en 2 puntos de 18 posibles y su desplome hasta la 19ª y penúltima posición.
Peor aún es lo del Valencia, cuyo último éxito data del 10 de noviembre, justo antes del parón mundialista, cuando se impuso 3-0 al Betis. A partir ahí, una debacle en toda regla con un empate y seis derrotas que ilustran su caída a zona de descenso (18º).
BARAJA SE ESTRENA AL FRENTE DEL EQUIPO ‘CHE’
Las consecuencias de esta crisis de resultados están siendo gestionadas de manera distinta en un sitio y en otro. En el Getafe, Ángel Torres está convencido de que el mal momento del equipo no obedece a un problema de entrenador y parece empeñado en mantener a Quique Sánchez Flores contra viento y marea. En el Valencia, por contra, el ‘baile’ no para y tras la destitución de Gattuso llegó la interinidad de Voro y ahora la incorporación de Rubén Baraja, exjugador del conjunto ‘che’ y que se estrena este próximo lunes en el Coliseum con todo lo que eso conlleva.
Quique es consciente de que a estas alturas “empatar ya no nos vale. Hemos salido de la racha de derrotas, pero somos conscientes de que empatar no es suficiente”, admitía el técnico tras el 1-1 frente al Rayo antes de ponderar que “intentamos quedarnos con aspectos positivos entre tantas desgracias, ya que son golpes que nos ponen a prueba la mente”.
David Soria, gran protagonista del duelo frente a los vallecanos al detener una pena máxima en el tramo final, apostaba por “hacer autocrítica porque si estamos penúltimos es que no se están haciendo las cosas bien. Si nos queremos salvar”, recalcaba el guardameta azulón, “hay que tener en cuenta que la salvación está en casa. Venga el que venga, sea el Valencia o el que sea, lo tenemos que afrontar como una final”, sostenía en alusión al decisivo duelo de este próximo lunes.