Acción del partido entre el Leganés y el Ibiza (foto: CD Leganés)

Hay derrotas que duelen, las hay que resultan traumáticas…y luego está la del Leganés el pasado fin de semana ante el Ibiza, colista de la categoría de plata y que encadenaba nada menos que diez jornadas sin ganar. Al amparo de Butarque, el conjunto pepinero confiaba en salir del bache de resultados -un solo triunfo en las siete jornadas precedentes- con una victoria que le permitiera recortar distancias con el sexto puesto y meterse de nuevo en la lucha por el playoff de ascenso.

Sin embargo, todo salió mal porque el ‘Lega’ sucumbió contra pronóstico frente al último de la tabla y el Albacete, que marca la frontera del playoff, se impuso al Sporting de Gijón. La consecuencia es que el sexto puesto está ya a 10 puntos de distancia con 12 jornadas por disputar y el objetivo se complica hasta límites insospechados, más que nada porque las sensaciones que transmite el equipo en el último tramo de competición no están siendo las mejores.

CINCO MESES SIN PERDER EN CASA

Además, los de Idiakez han visto quebrada su espléndida racha como locales, ya que hacía más de cinco meses que no perdían en Butarque (2 de octubre, 1-2 ante el Albacete) y desde entonces habían firmado 7 victorias y 4 empates delante de sus incondicionales. Esta fiabilidad casera les había llevado a situarse a tan solo dos puntos del sexto puesto (jornadas 21 y 22), pero ahora el riesgo de descolgarse esta ahí. Y es que, además de perder en casa, el ‘Lega’ se ha atascado de cara al gol y no ha sido capaz de marcar en los tres últimos compromisos ante UD Las Palmas, Mirandés e Ibiza.

La situación exige, pues, una reacción urgente y el propio Idiakez admitía a la conclusión del partido que “hay que asumir la derrota, aprender y seguir. Son lecciones para mí y para el equipo y seguro que ahora lo veremos todo un poco más lejos, pero lo único que podemos hacer es seguir creyendo porque este equipo merece crédito”, sostenía.