El viceconsejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Antonio Zapatero, ha comparecido este viernes para actualizar los datos de coronavirus en la región y anunciar que, pese a que la tendencia ha cambiado, el toque de queda se mantendrá a a las 22.00 horas y el cierre comercial y de la hostelería a las 21.00 horas, hasta el 18 de febrero.

Si el jueves los datos lo permiten, las medidas se flexibilizarán y se ampliará el toque de queda a las 23.00 horas y el cierre a las 22.00 horas. «Habrá una excepción en el caso de la hostelería así como los cines, teatros y espacios similares, ya que se les permitirá tener un cierre flexible, siempre que se respete el toque de queda a las 23.00 horas y no pudiendo admitirse público a partir de las 22.00 horas», ha explicado.

La incidencia acumulada (IA) en la Comunidad de Madrid a datos de este viernes, 12 de febrero, se sitúa en 625 casos por 100.000 habitantes, cuando hace una semana era de 860 y de 994 hace dos semanas.

«El nivel de transmisión es menor pero estamos en continúa alerta», ha dicho Zapatero, que ha confirmado dos nuevos casos de la cepa brasileña y que el 25% de contagios corresponden a la cepa británica. Así ha señalado que «tomamos medidas internas pero siguen viniendo casos desde fuera, por lo que poco podemos hacer».

En este sentido, el viceconsejero ha reiterado la petición del consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, de que el Gobierno de España controle a los pasajeros que provengan de Sudáfrica y Brasil.

Finalmente, Antonio Zapatero ha insistido en que el mensaje «no es meter miedo a los ciudadanos», sino que sigan extremando las medidas del uso de la mascarilla y la higiene de manos.