La Asamblea de Madrid ha aprobado este jueves la Ley de Patrimonio Cultural de la Comunidad de Madrid, con los votos de PP y Vox, que refuerza la protección, conservación y difusión de sus bienes.

El texto, que actualiza la legislación vigente desde hace 10 años, entrará en vigor el día después de su publicación en el Boletín Oficial regional (BOCM), prevista para las próximas semanas.

Entre las novedades que plantea la nueva normativa, la novena que se ha convalidado este año, se encuentra la creación del nuevo Patrimonio etnográfico, que preservará aquellos bienes testimonio y expresión de la identidad, cultura y formas de vida tradicionales, como la arquitectura religiosa, cruces (que podría incluir la del Valle de los Caídos), núcleos históricos antiguos o relojes de sol anteriores al siglo XX, entre otros.

La nueva regulación, «más moderna y eficaz», integra también la investigación y educación, para garantizar la transmisión adecuada de este legado a las futuras generaciones, al tiempo que fomenta su disfrute y conocimiento por parte de las actuales.

TRES NIVELES DE PROTECCIÓN

Por un lado, esta norma fija los principios de actuación para las administraciones públicas (vertebración del territorio, respeto a la pluralidad del patrimonio, o transversalidad) y se delimitan las competencias de la comunidad autónoma, los municipios y los órganos consultivos, con el objeto de clarificar y ordenar su actuación en la materia.

Establece ahora tres niveles de protección, añadiendo un tercero, junto a los Bienes de Interés Cultural (BIC) y los de Interés Patrimonial (BIP), el de los Catalogados, que cuentan con valores históricos y culturales, integrando el patrimonio de la Comunidad de Madrid.

Se introducen también nuevas categorías de bienes inmuebles, como la de sitio científico o itinerario cultural, y se crea el Catálogo de Patrimonio Cultural de la Comunidad de Madrid, que pasa a incluir todo tipo de bienes protegidos, y no sólo los inmuebles como sucede en el actual Catálogo Geográfico Regional.