La investigación judicial de la muerte de un anciano en la Residencia de Mayores de Alcorcón continúa abierta. Y así, la cuarta enfermera investigada y perteneciente al turno de tarde se ha eximido ante el juez de «cualquier tipo de responsabilidad» derivando la misma al propio centro.

Fuentes jurídicas señalan que la facultativa ha indicado al juez Adolfo Carretero que a ella «no le corresponde la aplicación del protocolo de personas desaparecidas en el centro», y que en todo caso «sus competencias como enfermera son siempre asistenciales y sanitarias».

Con ello la investigada, que continúa siéndolo después de la declaración de este miércoles y a falta de concretar el tipo penal que se le pueda aplicar, ha derivado la responsabilidad o bien a la dirección del centro o bien a la Unidad de Control del centro, según las mismas fuentes.

Precisamente el juez que lleva el caso decretó hace unos días que se localizase al responsable de la Unidad de Control de los ancianos, el cuidador que se encarga de las vigilancias durante los paseos de los mismos. Las mismas fuentes han explicado que se le va a localizar, puesto que es una cuestión administrativa, y próximamente se le tomará declaración en calidad de investigado.

A partir de ahí, ya sólo quedaría recibir el informe del forense. Una vez que el juez reciba el informe, se declarará concluida la Instrucción y emitirá el auto según el cual se archivarán las actuaciones o bien se transforma en Diligencias Previas con la correspondiente imputaciones.