El primer equipo masculino del Balonmano Quental Pinto se resiste a bajarse de la nube y el pasado fin de semana conquistó un nuevo logro, ya que su triunfo ante el Gerovida BM Arroyo (27-26) y el empate del Cafés Toscaf Avilés ante el BM Soria le permiten encaramarse a lo más alto de la clasificación de su grupo de Primera Nacional por vez primera en las cuatro temporadas que lleva militando en la categoría de bronce del balonmano nacional.
Y buena parte de culpa de este histórico liderato lo tiene su inconmensurable racha de resultados, difícilmente explicable en una categoría tan competitiva. Con su triunfo del pasado sábado ante el conjunto vallisoletano de Arroyo de la Encomienda los pinteños han enlazado nada menos que 13 triunfos consecutivos y su progresión en la tabla conforme ha ido encadenando éxitos no ha parado hasta ponerse al frente de la tabla empatado con los avilesinos, pero con mejor average particular, y con un punto de ventaja sobre el Ikasa Madrid.
Para localizar la última derrota de los de María Alirangues habría que remontarse hasta el ya lejano 3 de noviembre del año pasado, cuando cedieron con cierta nitidez en su visita al BM Soria (22-16). Desde entonces han pasado ya más de tres meses y medio sin volver a morder el polvo y sin siquiera ceder un empate. Cierto es que seis de estos trece triunfos han sido por un solo gol de diferencia, pero eso también dice mucho de su fiabilidad en finales apretados.
Dos de esos triunfos por la mínima han llegado en sus más recientes compromisos ligueros, la visita a Salamanca (27-28) y el duelo del pasado fin de semana ante el BM Arroyo (27-26), al que se impuso en un agónico final tras un bronco partido en el que los rojinegros no rindieron a la altura de anteriores compromisos y cerca estuvieron de ver quebrada su inmaculada racha de victorias. Luis Arroyo (8), Manuel Valera (5) y Andrés Servant (4) fueron los máximos goleadores del conjunto pinteño.
VISITA A VALLADOLID
Y ya con la vista puesta en el futuro más inmediato, el BM Pinto visita este sábado al Universidad de Valladolid, que marcha 14º en la clasificación, con el propósito de completar una vuelta entera ganando, ya que su siguiente rival sería el BM Soria, último contrincante en hacer hincar la rodilla a los de María Alirangues, que a diez partidos del final de la fase regular siguen metidos de lleno en la lucha por disputar la fase de ascenso a la División de Honor Plata.