Urbanización San Cosme (Foto.- Google Maps)

El conserje de una urbanización de Valdemoro ha sido detenido después de que fuera denunciado por instalar cámaras ocultas en los domicilios de los vecinos y grabarles en la intimidad. La denuncia partió de una vecina que advirtió cuando se duchaba que el conserje, al que había avisado para reparar una avería en el baño, se había dejado olvidada una caja herramientas.

Intrigada, inspeccionó la caja y descubrió un agujero que miraba hacia la ducha. La vecina abrió la caja y se encontró una cámara espía encendida. De inmediato dio aviso a la policía, que localizó al conserje en su domicilio y lo arrestó.

Los hechos ocurrieron en la Urbanización San Cosme, en la calle Alcalde Antonio Pariente Cuesta. 10. Óscar Quesada, que así se llama el detenido, realizaba las labores de mantenimiento y jardinería en la urbanización y era muy apreciado por los vecinos por su amabilidad y su disponibilidad para ayudar en cualquier tarea doméstica más o menos complicada. Un detalle muy suyo era, por ejemplo, que repartía chuches a los niños cuando volvían del cole. Siempre estaba dispuesto a realizar cualquier chapuza del hogar o a resolver cualquier avería inesperada.

Tras la denuncia, y personados en su domicilio, los policías encontraron varios dispositivos en los que almacenaba imágenes de vecinos y vecinas desnudos en sus casas. Había tanto niños como adultos. Interrogado por los agentes, Quesada reconoció que llevaba años realizando estas grabaciones, que le gustan lo mismo los hombres que las mujeres que los menores, y pidió disculpas. En la urbanización sospechan que quedan cámaras ocultas no detectadas que siguen activas.

El conserje mirón ha quedado en libertad con cargos. Se enfrenta a penas de entre 1 y 4 años de prisión y una multa de 12 a 24 meses por revelación de secretos, que podrían ser de entre 2 y 5 años de prisión si ha difundido las imágenes.