El Ayuntamiento de Leganés ha aprobado una modificación presupuestaria de 3,2 millones de euros para afrontar el pago de varias sentencias judiciales condenatorias en firme que ya no podían ser recurridas. El principal pago, fijado en un millón y medio de euros, servirá para pagar la segunda cuota de la sentencia por la expropiación del parque Picasso, cifrada en seis millones de euros más los intereses de demora.

El litigio económico por esta franja de terreno entre Leganés y Zarzaquemada se inició hace décadas por los propietarios del terreno. Tras la sentencia, el ayuntamiento alcanzó un acuerdo con los denunciantes sobre el plan de pagos para abonar esta deuda en cinco años.

El siguiente pago, cercano al millón de euros, corresponde al abono de la sentencia judicial ganada por la empresa de mantenimiento de la vía pública Reynober Velasco. Además, con la modificación presupuestaria se podrá hacer frente al pago de intereses de demora de varias sentencias o gastos jurídicos, así como a indemnizaciones.

El alcalde de Leganés, Santiago Llorente, ha declarado que “no quedaba otra opción que pagar ya que varios juzgados nos han recordado la responsabilidad que tenemos en caso de no cumplir estas sentencias y no había ninguna posibilidad de recurso”.

La modificación presupuestaria se llevó a cabo gracias al recorte en otras partidas referentes a las prestaciones económicas a empleados, el gasto en parques y jardines y complementos de fuerzas de seguridad. A pesar de estos recortes, “los salarios de los empleados están garantizados hasta final de año”, indicó Santiago Llorente. Por su parte, el concejal de Hacienda, Pedro Atienza, justificó que se podía detraer dinero de esas partidas presupuestadas en 2014 –fecha de aprobación de las últimas cuentas municipales-, debido a que estos gastos son menores ahora que en esa fecha.

“El Ayuntamiento tendrá que pagar en los próximos años en torno a 20 millones de euros y si no se paga ahora se disparará el abono de las sentencias con intereses hasta los 25 o los 30 millones de euros”, añadió.

Desde el PP se posicionaron de forma favorable a la modificación presupuestaria y su voto fue fundamental a la hora de que saliese adelante la propuesta del gobierno. Su portavoz, Miguel Ángel Recuenco, manifestó que “si no cumplimos con las sentencias realizaríamos una ilegalidad”. El PP indicó que apoyaba este acuerdo si el alcalde se comprometía a incrementar la plantilla de la Policía Local, tal como posteriormente hizo el regidor.

En contra se posicionarían los 13 concejales de ULEG, Ciudadanos, los no adscritos de Ganar y Leganemos. El portavoz de este último grupo político, Fran Muñoz, definió de “conchabeo político entre PP y PSOE” la aprobación de la modificación del presupuesto y criticó la reducción del dinero invertido en parques y jardines debido a que se encuentran en mal estado.

Desde ULEG recordaron que habían pedido la creación de una comisión de investigación sobre el pago de estas sentencias, señalando que esta modificación presupuestaria solamente tenía como objetivo pagar “condenas judiciales e indemnizaciones consecuencia del mal hacer en pasadas legislaturas tanto de gobiernos del PSOE como del PP de Leganés”.

Los concejales no adscritos de Ganar Leganés exigieron la dimisión de los responsables políticos de estas sentencias que todavía pertenecen a la corporación. Además, indicaron que el ayuntamiento tendrá que hacer frente a otros 13,8 millones de euros en otras sentencias como las referentes al centro comercial Plaza Nueva, el pago a bufetes de abogados o al Ministerio de Defensa por el bulevar de San Nicasio.

La permuta de suelo del centro comercial también supone una importante deuda, que supera los seis millones de euros, al no cumplirse lo pactado por parte de la administración local. Dicha permuta se había formalizado en marzo de 2005, cuando era concejal de Urbanismo Florencio Izquierdo, entre el ayuntamiento y la empresa Festival Park, ahora denominada Portfolio. En esta operación el Consistorio se comprometió a ceder terreno  del centro comercial por suelo ubicado en la colina de la Finca de la Mora.