La alcaldesa de Alcorcón, Natalia de Andrés, ha avanzado este miércoles en rueda de prensa, que los técnicos municipales continúan evaluando los daños producidos en la ciudad por la borrasca Filomena.

Una vez que se aprobó solicitar la declaración de zona catastrófica, la regidora ha informado que hay un plazo de veinte días para computar el coste de los desperfectos. Tarea que ha reconocido que es «muy compleja» y que incluso se está necesitando «ayuda externa».

En el Pleno ordinario que se celebra este miércoles, De Andrés dará explicaciones a la Corporación tras haberlo pedido el PP, al que ha reprochado que no haya propuesto ninguna moción para esta sesión.

Quien sí se ha pronunciado ya es VOX, que ha pedido la dimisión de la alcaldesa. El grupo municipal asegura que la primera edil de Alcorcón no estuvo presente en la Dirección del Plan de Actuación de Inclemencias invernales, cuando así lo marca la propia normativa.

«Es incomprensible que la alcaldesa, cuya primera función como directora del Plan era la de activa el mismo, ni siquiera estaba presente en la reunión del 5 de enero», ha dicho el portavoz local de VOX, Pedro Moreno.

Además sostiene que el Comité Asesor creado «no estaba bien compuesto y configurado como marca el Plan», lo que a su juicio demuestra «la falta de rigor y profesionalidad de este Gobierno». Por todo esto, el portavoz de VOX acusa a la alcaldesa de «desaparecer tras su pregón de Reyes y reaparecer el 11 de enero, cuando pasó la gran nevada». Motivo por el que piden su dimisión.

«CASO OMISO A LA ULTRADERECHA»

Preguntada sobre este asunto, la alcaldesa ha reconocido que «la gestión de Filomena ha sido muy complicada», si bien cree que la petición de VOX «no tiene ningún sentido».

Así ha reafirmado que «yo a la ultraderecha le hago siempre caso omiso, no me afecta lo que digan», al tiempo que le ha dicho al portavoz de VOX que compare Alcorcón con el Ayuntamiento de Madrid «al que apoyan».