El clamor de los vecinos de Arroyomolinos se impone. Los autobuses de la L-499, que prestan servicio al propio municipio, Fuenlabrada, Moraleja de Enmedio, Batres y Móstoles, recuperan su antigua cabecera, a partir de este mismo jueves, 16 de diciembre.

«Con este cambio, entre la líneas 498 -que mantiene su cabecera- y la 499 quedarán cubiertos los trayectos a las dos estaciones de cercanías ubicadas en Móstoles: Central y El Soto, lo que facilitará la movilidad de los vecinos de Arroyomolinos», han explicado desde el Gobierno que dirige la popular Ana Millán.

Los usuarios de la línea emprendieron una recogida de firmas instando a revertir la decisión que impulsó el Ayuntamiento en verano de este año. Obligado por la presión vecinal, el Consistorio comunicó al Consorcio Regional de Transportes a modificar de nuevo la línea y volver a las antiguas cabeceras.