
Un viaje al corazón de la existencia humana a través de Auschwitz
En 1946, un año después de la liberación de los campos de concentración nazis, el psiquiatra Viktor Frankl publicó El hombre en busca de sentido, breve y poderoso testimonio capaz de diseccionar el alma hasta un punto nunca antes y tampoco después logrado.
Reflexión y memoria se van uniendo en esta obra en la que relata Frankl su experiencia como prisionero en Auschwitz. Pero va más allá, y con ello nos regala una de las enseñanzas más profundas del siglo pasado: incluso en medio del dolor más terrible, el ser humano puede encontrar un sentido. Y además puede elegir.
Frankl no narra los horrores del Holocausto como estamos acostumbrados, su narración está libre de todo sentimentalismo, lo que le confiere aún más fuerza. Describe con precisión y una claridad que no admite interpretaciones cómo los prisioneros eran despojados de todo. Y en ese extremo infernal, el psiquiatra observa que algunos hombres conservan su libertad interior.