Reaparece Borja Mayoral y un gol suyo en la prórroga frente al Granada mete al Getafe en octavos de Copa (0-1)
Qué importante es Borja Mayoral para este Getafe. Su dilatada ausencia por lesión resultó tremendamente dañina para el conjunto azulón, huérfano durante muchos meses de un delantero de referencia como el parleño. Su reaparición este viernes en la Copa del Rey ha resultado crucial para los de Bordalás, que no encontraban la manera de hincarle el diente al Granada hasta la letal maniobra de Borja en el área granadina.
Se retorno se producía en el minuto 79, cuando la eliminatoria andaba tan atascada que finalmente ha tenido que dilucidarse en la prórroga. Aunque se le notaba todavía lejos de su mejor forma, el olfato no lo ha perdido y cuando Bertug ha sido capaz de desembarazarse de Williams e Insua junto a la línea de fondo para poner un centro al huevo, ahí estaba Mayoral para sorprender a todo el mundo y embocar desde cerca con la sutileza de un avezado ariete como él (93′).
Y ahí se ha resuelto un duelo tremendamente equilibrado, en el que las concesiones han brillado por su ausencia y las ocasiones han escaseado, al menos las que han rondado el gol. Si acaso, un par de ellas en el tramo inicial del encuentro, una de Sola para el Getafe a pase de Milla que se ha marchado cerca del palo de Mariño (8′). La otra, de Tsivaishvili para el Granada cuando su remate desde la frontal se le ha escapado ligeramente desviado (15).
Dos tantos anulados a Weissman por fuera de juego, uno de ellos tremendamente ajustado, han puesto alerta a la zaga azulona, que sufría un nuevo sobresalto en el minuto 60, cuando Letacek sacaba junto a la escuadra un cabezazo de Reinier.
En la última media hora, sin embargo, el Getafe ha ido poco a poco tomando la iniciativa y ha reducido ostensiblemente las prestaciones del conjunto andaluz, visiblemente fatigado conforme avanzaban los minutos. Un centro chut de Coba ya en los últimos instantes ha encontrado en el segundo palo a Juan Iglesias, cuyo cabezazo ha ido a estrellarse en la parte superior del larguero.
Ha sido el último aldabonazo antes de una prórroga en la que el Granada ha estado a punto de adelantarse en un remate de Reinier que se ha marchado alto instantes antes de que Borja Mayoral liquidase la eliminatoria con un gol de esos que valen su peso en oro. Todavía quedaba mucho tiempo y los de Escribá se han volcado en pos de la meta de Letacek, pero entre su falta de acierta y un par de buenas intervenciones del cancerbero azulón la eliminatoria se ha acabado decantando del lado del ‘Geta’, que estará en octavos de final.