Agentes de la Policía Nacional han detenido en Pinto a un hombre de 25 años, de origen venezolano, que presuntamente agredió sexualmente a su propia hija de pocos meses y utilizaba diferentes redes sociales, así como servicios de mensajería instantánea, tanto para descargar como para difundir estos contenidos.

La madre de la menor, ciudadana española de 23 años, también fue arrestada por supuestas conversaciones con su pareja en las que intercambiaban pornografía infantil, ha informado este martes la Dirección General de la Policía en una nota de prensa.

Sin embargo, se investiga si su pareja utilizaba su cuenta de Telegram para este intercambio y evitar que él fuera interceptado por la Policía, como ha alegado la propia detenida, han indicado a  fuentes de la investigación.

 

LA INVESTIGACIÓN

Las pesquisas se iniciaron hace poco más de un año, cuando agentes de la Unidad Central de Ciberdelincuencia, con información del patrullaje activo que realizan en la web y en redes sociales y con la colaboración con el HIS (Homeland Security Investigations) de los Estados Unidos, detectaron a una persona que compartía imágenes sobre explotación sexual a menores de corta edad a través de diferentes redes sociales.

Los investigadores, a través de diversas gestiones, pudieron identificarlo e investigar su entorno, momento en el que descubrieron que acababa de tener una hija con su pareja, nacida en mayo 2022, lo que aceleró la actuación policial.

Además de todos los indicios recopilados y al detectar que además el varón había sido arrestado por compartir pornografía infantil en 2019, los agentes solicitaron una entrada y registro en su domicilio que entonces tenían en el madrileño barrio de Aluche, donde se encontraron evidencias de que el detenido no solo descargaba este material sino que también lo difundía a terceros. Tenía en el móvil un centenar de vídeos de menores de dos años con contenidos sexuales muy duro.

El piso donde se encontraban la madre, el padre y la menor estaba en pésimas condiciones, por lo que los agentes dieron parte a los Servicios Sociales de la Comunidad de Madrid, quienes retiraron la custodia a los padres unas semanas después. En la vivienda encontraron también restos de drogas y la niña tenía lesiones en la cara.

ORDEN DE ALEJAMIENTO A LOS PADRES

El juez decretó una orden de alejamiento de los padres sobre la bebé, pero dejó al arrestado en libertad. Mientras tanto, en el análisis del material intervenido por parte de agentes del Grupo I de Protección Central de Investigación Tecnológica encontraron vídeos en los que el detenido había agredido sexualmente a su hija, además de múltiples conversaciones en las que ofrecía al bebé a terceros para tener sexo, incluso tríos.

Descubrieron que había imágenes del padre con los genitales dentro la boca de su bebé y contenidos más aberrantes de cuando la pequeña apenas tenía medio año de vida, según han indicado las mismas fuentes. Por todo ello, pusieron en marcha un nuevo operativo, que se ejecutó a finales de agosto, donde fueron detenidos este padre en el piso en el que ahora residían en Pinto.

Solo el hombre ha pasado a disposición judicial y ya ha ingresado en prisión provisional. Éste habría desvinculado a su mujer de lo ocurrido y habría reconocido al juez que «estaba enfermo y no podía evitar lo que hacía».