La alcaldesa de Alcorcón, Natalia de Andrés, ha comparecido este miércoles en rueda de Prensa para analizar la sentencia que la condena a cinco años de inhabilitación, por la quiebra de EMGIASA, dejando claro que se trata de un asunto mercantil que no la invalida para seguir en su cargo, con lo que ha descartado dimitir.

«No tiene ningún sentido plantear mi dimisión», ha dicho tras una pregunta de Al Cabo de la Calle, explicando que tras conocer el fallo, lo puso en conocimiento de la Asesoría Jurídica del Ayuntamiento de Alcorcón, que ha emitido un informe de tres páginas desvelado por la propia alcaldesa, donde reitera que el fallo no es firme y que «no existe inconveniente jurídico que impida el normal desarrollo de sus funciones».

De Andrés ha calificado la sentencia, por otro lado, de «sorpresiva» y que «no se ajusta a los hechos». Para la regidora, «es obvio que no confeccionábamos la contabilidad de EMGIASA, puesto que los políticos no debemos interceder en esas cuestiones», reiterando que en ese tiempo «nunca hubo un documento jurídico en contrario a lo que hicimos».

Asimismo, ha hecho hincapié en que «dado que la sentencia no es firme vamos a apelar», recordando que «este concurso ha sido un instrumento político para destruir la empresa de vivienda» y que «no hay delito, puesto que «esto no es Pozuelo, Boadilla o Arroyomolinos».

Finalmente también ha desvelado que cuenta con el respaldo de su partido y que ha recibido el apoyo de otros compañeros, al tiempo que ha hablado con el secretario general de los socialistas madrileños, Juan Lobato, del que confía haber convencido en sus explicaciones.