El alcalde de Pinto, Juan Diego Ortiz, sacó su vena más dictatorial a escasos días para las elecciones municipales del domingo 28 de mayo.

En una decisión profundamente antidemocrática y coartando el derecho a la libre participación, dio el pasado martes órdenes directas a los trabajadores de la Policía Local y PIMER-Protección Civil de no acudir a la mesa redonda organizada por el Partido Popular para debatir la situación de la seguridad ciudadana y los servicios de emergencias municipales.

El mandato partió directamente desde la Jefatura, ostentada por Juan Diego Ortiz, y amenazaba con sanciones disciplinarias si participaban en el evento. “Nos han prohibido expresamente la asistencia a todo el personal”, aseguró al Partido Popular un trabajador municipal horas antes de su comienzo.

Por si esto no fuera suficiente, desde el PSOE de Pinto enviaron a su secretario de Organización local para grabar al público asistente y comprobar, según sus propias palabras, “quienes habían acudido”. La grabación y el comportamiento del dirigente socialista rozó por momentos el acoso.

Salomón Aguado, candidato del Partido Popular, inició el acto informando de estos hechos, calificándolos como “un atropello del Partido Socialista a las libertades públicas”. “Al alcalde no le ha bastado en esta legislatura con intentar sancionar a los trabajadores que defendían su independencia, no le ha bastado con llamar “monstruo” al PIMER-Protección Civil, o con acusar de mentir a los sindicatos policiales. Hoy el candidato del PSOE de Pinto ha decidido que personas libres participen en un acto cuyo objeto era hacer una valoración de uno de los pilares de nuestro bienestar: la seguridad”, señaló el candidato popular.

Aguado finalizó indicando que “el miedo se ha instalado en el Partido Socialista. El miedo a perder unas elecciones y un gobierno que ellos creían atado gracias a pactos de espaldas a los vecinos. Sin embargo, el cambio es imparable y comienza el 28 de mayo”.